Asimilar errores, plantea Gerardo Rosete, remplazo del destituido Rodríguez Pazos

No avalamos conductas fuera de la ley, sostiene el nuevo edil petista de Mazatlán

El alcalde reconoció que su partido tendrá que mejorar los perfiles de sus candidatos

RENATO DAVALOS

En cinco meses de gobierno, el hoy ex alcalde de Mazatlán, el petista Jorge Rodríguez Pazos, erosionó los vínculos entre gobierno y sectores locales, lo que derivó en su separación y en la llegada de Gerardo Rosete, munícipe sustituto que tendrá como reto primordial la reconstrucción de relaciones, especialmente con el empresariado, y evitar que su partido no caiga de las preferencias electorales.

Gerardo Rosete estimó que en el futuro su partido tendrá que mejorar los perfiles de los candidatos para frenar que "elementos no deseables" sean postulados a cargos de elección popular.

La fugaz gestión de Rodríguez Pazos comenzó con un escándalo familiar y hoy es parte de una indagatoria por la Contaduría Mayor de Hacienda del Congreso local, dominado por los priístas. Paralelamente Rosete ha decidido la contratación de dos despachos privados para determinar si hubo o no irregularidades y evitar sorpresas en las conclusiones priístas.

Al término de los análisis contables habrá una compulsa de ambos trabajos para saber si hubo malos manejos de Rodríguez Pazos. El Partido del Trabajo ha hecho el deslinde respectivo y señalado que si hay delito que perseguir, que sea castigado conforme a la ley.

La recomposición con todos los sectores avanza, estimó Rosete. Especialmente, en el ámbito empresarial hay ya compromisos de inversiones brasileñas y estadunidenses, de manera primordial en el tema turístico e industrial, aunque todavía están por definirse los montos específicos.

"No avalamos conductas fuera de la ley", aseguró Rosete. "Por ahora resulta fundamental recuperar cabalmente la confianza que se hubiese perdido con la anterior administración".

El análisis de los futuros candidatos, de cara al proceso electoral del año venidero, tiene que ser muy cuidadoso de los detalles profesionales y de trayectoria de los aspirantes, comentó. A toda costa, no puede incurrirse en el mismo error porque sería muy perjudicial para el partido, indicó.

Las circunstancias imponen que el PT asimile los errores pasados y procure que no se repitan. De la forma en que se establezcan los "nuevos puentes" con el resto de los sectores sociales dependerá que la ciudadanía pulse un nuevo ánimo, vaticinó.

Con relación a la actitud que asumió el gobernador Juan Millán en el asunto del cambio de alcalde, Rosete definió que fue "institucional" y que, sobre todo, se respetó una posición que había ganado el PT.

La contienda electoral del próximo año, pronosticó, será entre el Partido Acción Nacional y el PT, pues la "caballada priísta está flaca. Tenemos la expectativa de repetir al menos el distrito electoral en el que se triunfó en los pasados comicios".