Los indígenas desconfían del gobierno foxista, afirma
Muy difícil, lograr la paz en Chiapas, opina Stavenhagen
Recibió un premio de la organización judía B'nai B'rith
PATRICIA MUÑOZ RIOS
El relator de la Organización de Naciones Unidas para los Derechos Humanos de los Pueblos Indígenas, Rodolfo Stavenhagen, sostuvo que en México los derechos de los campesinos están maltrechos, por violaciones, abusos, violencia selectiva y fallas en la administración de justicia, pero sobre todo por el viejo problema de la tenencia de la tierra, y opinó que será muy "difícil" lograr la paz en Chiapas porque los indígenas creen que este gobierno, igual que el anterior, no les está cumpliendo.
Stavenhagen recibió el premio por la defensa de los derechos humanos que otorga la organización judía B'nai B'rith Internacional, que tiene casi 160 años de establecida y se dedica principalmente a la defensa de grupos vulnerables en todo el mundo. Además, combate la intolerancia y el racismo. El relator dijo sentirse honrado con el reconocimiento.
Entrevistado antes del comienzo de la ceremonia en que fue galardonado, dijo que en todo el planeta falta mucho por hacer en la defensa de los derechos humanos de los pueblos indios.
En México, expuso, "la situación es complicada", porque "hay conflictos que las autoridades no quieren o no pueden resolver, y de repente estallan, y los políticos se culpan unos a otros", como el de la tenencia de la tierra, que no se ha atendido durante décadas, por lo que conduce a violencia extrema, como ocurrió en el paraje de Agua Fría, Oaxaca.
Propuso "escuchar a las comunidades indígenas y las organizaciones para conocer un sinnúmero de quejas y reclamos", así como demasiados problemas no resueltos, de violencia selectiva y de fallas en el sistema de administración de justicia.
Explicó que en el encuentro por la paz que se acaba de realizar en Chiapas, convocado por Samuel Ruiz, se escucharon voces de muchas organizaciones indígenas quejándose de la falta de respeto a los derechos humanos en la entidad. Asimismo, coincidieron en que ni siquiera se cumple lo que acordó el gobierno con los zapatistas. "Hay una situación de decepción y a veces de desesperanza", además de engaño, manipulación, caciquismo y corrupción, abundó.
El problema de los desplazados tampoco se ha resuelto, dijo. Añadió que los zapatistas parece que están en un compás de espera y dicen: "para qué hablamos con este gobierno, si no nos está cumpliendo, igual que el anterior".