miércoles 24 de julio de 2002
La Jornada de Oriente publicación para Puebla y Tlaxcala México

 
n Por la falta de foresta, en 25 años la Angelópolis se quedará sin agua: Vera González
628 mil hectáreas de zonas arboladas de Puebla son "áreas perturbadas": Conafor

Jorge Machuca Luna n

En la entidad, 628 mil hectáreas de zonas arboladas son consideradas como "áreas perturbadas" debido a que la flora ha sido afectada de manera temporal o permanente por las plagas, los incendios o la tala clandestina, esto lo aseguró ayer el coordinador en Puebla de la Comisión Nacional Forestal, José Antonio Vera.
Lo anterior, dijo, ha sido comprobado por la dependencia a través de estudios georeferenciados utilizando satélites con los que se ha captado imágenes del bosque poblano y su degradación en los últimos 20 años.
Asimismo, explicó que es urgente que, para garantizar el abasto de agua a largo plazo, dentro de las políticas públicas municipales se incluya que los pobladores de las demarcaciones que se benefician del líquido que se genera en las partes altas de las cuencas paguen a los moradores de esas zonas por mantener en buen estado la foresta utilizada para captar agua y oxígeno. El concepto, explicó el representante federal, es conocido como pago de servicios ambientales y se ha comenzado a aplicar en localidades de Atlixco y Coatepec.
De continuar la acelerada deforestación, vaticinó Vera González, en 25 años la ciudad de Puebla y su zona conurbada se quedará sin fuentes de abastecimiento de agua, porque al no haber árboles que faciliten y contribuyan a recargar los mantos freáticos desde las partes altas de los volcanes Popocatépetl e Iztaccíhuatl, así como en La Malinche, no habrá líquido disponible en el subsuelo y se tendría que traer de localidades lejanas a un mayor costo que el actual.
A lo largo de la entidad, 190 mil hectáreas poseen potencial maderable -explicó-, de estas, sólo 85 mil tienen un manejo técnico por medio de permisos que entrega la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), y audita la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa); el resto es la que mayor peligro corre, ya que es susceptible de ser talada de manera furtiva, o ser víctima de plagas e incendios.
Añadió que la Conafor busca que el 100 por ciento de la zonas maderables estén bajo manejo técnico, ya que sólo así se podrá garantizar la sobrevivencia del bosque poblano.

El pago de servicios ambientales

En la actualidad, los sistemas operadores del servicio de agua potable usan parte de sus ganancias para ampliar su infraestructura para distribuir el líquido, mas no se interesan en invertir en la generación del producto que distribuyen, ya que existen "candados" legales que se los impiden, comentó Vera.
"Es una cuestión de seguridad nacional; tiene que ir empatado el cuidado del suelo, agua y bosque", recordó que Puebla se abastece de La Malinche y de la zona del PopoIzta; en esos sitios los árboles permiten que llegue la humedad y se infiltre al suelo para después recargar los mantos freáticos, "si se elimina los árboles, la lluvia no cae con igual frecuencia, y si ésta aparece no permea el suelo".
Para que Puebla siga teniendo agua debe invertir en la conservación de la foresta de los volcanes y en La Malinche, el especialista apuntó que "una realidad es que a los que viven debajo de la cuenca no les interesa lo que pase en la parte alta de la cuenca y viceversa, pero ellos son los dueños de los recursos; si Puebla quiere agua tiene que pagar para que la comunidad (de la parte superior de la cuenca) mantenga su vegetación".
Vera sostuvo que es necesario que incluso el pago de servicios ambientales se incluya en la Ley Federal de Derechos y en las normas estatales y municipales equivalentes; relató que en Costa Rica se ha comenzado a poner en marcha tal estrategia gubernamental, por la que a los labriegos de las zonas arboladas que captan el agua se les paga anualmente el equivalente a 12 mil pesos por hectárea que mantengan en buenas condiciones tales sitios.
En el caso de Coatepec, Veracruz, indicó que ahí el sistema operador del servicio de agua, ha fomentado que la población añada 6 pesos a su cuenta del líquido que recibe cada trimestre.
Con el dinero que se ha comenzado a recabar se integró un fideicomiso en el que Pemex, Coca Cola, Nestlé, el gobierno estatal y municipal de Veracruz aportan cada uno cantidades similares a las recabadas entre la ciudadanía, que son dedicadas al pago de las personas responsables de que la parte alta de la cuenca local esté arbolada y logre capturar el agua suficiente para abastecer en el futuro a esa alcaldía.
Lo mismo se podría hacer en Puebla con los leñadores y carboneros de San Miguel Canoa, previa expulsión de "mafias" de cortadores de árboles de la zona, para que los labriegos pudieran tener un ingreso a cambio de cuidar los sitios arbolados, reforestarlos y darles un manejo técnico.

Apoyos a productores
Por otra parte, Antonio Vera indicó que este año la dependencia que representa erogará en la entidad de manera conjunta con el gobierno estatal, 33 millones de pesos destinados a los productores que poseen permisos de manejo forestal, para que puedan comercializar la madera que corten, previa industrialización.
Dijo que es frecuente que quienes poseen permisos, no los exploten por falta de dinero para comprar maquinaria que les permita poder vender productos diferentes a un árbol cortado, por lo que éstos optan por entregar sus permisos a "coyotes" quienes les pagan a 200 pesos el metro cúbico de madera por el que ellos cobran cuatro veces más, dinero que los labriegos podrían ganar comercializando la madera directamente.