Su deuda total se estima en 500 mil mdd, revela investigación para el Financial Times
Inminente, nueva cadena de quiebras de empresas de gas y petróleo de Estados Unidos
Los casos WorldCom y Enron se quedarán cortos, vaticinan analistas
Nueva York y Houston, 28 de julio. Bancos y tenedores de bonos de Europa y Estados Unidos prestaron alrededor de 500 mil millones de dólares (poco menos del producto interno bruto de México) al sector petróleo y gas de Estados Unidos, que atraviesa por una severa crisis, revelan investigaciones recientes encargadas por el Financial Times. La cifra hace surgir temores de que una nueva racha de quiebras corporativas, como secuela del escándalo de Enron, exponga a los acreedores a fuertes pérdidas.
Dynegy y Williams, empresas que tienen deudas combinadas por más de 20 mil millones de dólares, están entre las industrias que podrían verse en quiebra, después del colapso de sus mercados energéticos y de una crisis de confianza de los inversionistas.
Si bien las compañías comercializadoras de energía son las que están sujetas a mayor presión por el momento, la caída de los precios de la electricidad golpea las finanzas de todo el sector petróleo y gas en Estados Unidos, cuya deuda total, según estimaciones de la firma independiente SNL Financial, ascendía a fines del año pasado a unos 450 mil millones de dólares.
Karl Miller, quien estableció la base europea de Enron y es ahora consultor de compañías energéticas en apuros, afirma que estas cifras no dan una idea exacta de las situación, pues existen grandes sumas de deudas que no se consignan en los balances de las empresas.
"Las gerencias continúan ocultando la verdad a los mercados de capital. Han llevado a cabo transacciones descaradamente fraudulentas y no están dispuestas a asumir las consecuencias."
Algunas fuentes internas de la industria creen que las pérdidas para los bancos y tenedores de bonos podrían rebasar las causadas por el colapso de WorldCom y Global Crossing. Las dos compañías de telecomunicaciones solicitaron protección de la ley de quiebras con deudas combinadas por 44 mil millones de dólares.
"Hemos rebasado el punto de no retorno en cuanto a niveles significativos de morosidad de pagos en la industria energética, junto a los cuales los casos WorldCom y Global Crossing quedarán empequeñecidos", dijo Miller. "No hay duda de que muy pronto veremos múltiples bancarrotas."
Las compañías estadunidenses de energía contrajeron enormes deudas a fines de la década de 1990 para aprovechar la desregulación, invertir en infraestructura y construir operaciones comerciales.
La deuda de las ocho mayores compañías energéticas se incrementó 200 por ciento en tres años, a 115 mil millones de dólares, en cifras a mayo de 2002, según SNL Financial. Los prestamistas fueron atraídos por el fuerte crecimiento en ganancias que mostraban las compañías, basado en predicciones optimistas de los futuros precios de energéticos en Estados Unidos.
Después de la caída de precios, las compañías -entre ellas Calpine, Reliant, Mirant, Aquila, El Paso, Duke y AES- luchan ahora por enfrentar sus deudas mientras el flujo de efectivo se seca y otras fuentes de crédito se cierran.
Entre los bancos que más activamente tratan de arreglar financiamiento para el sector se encuentran Citigroup y JP Morgan Chase -ambos bajo escrutinio por su papel en el financiamiento de Enron-, así como Bank of America.
No está claro cuánta deuda de compañías energéticas tienen estos bancos y cuánto han transferido a otros prestamistas. En el caso de las compañías de telecomunicaciones que han quebrado, buena parte de la deuda fue vendida por los bancos a otros inversionistas.
Traducción: Jorge Anaya