Se pedirá a los trabajadores racionalizar recursos, afirma el contralor interno de la institución
Evalúan en la UNAM suspender contrataciones, ante falta de fondos
La "astringencia presupuestal" ha limitado actividades, como investigaciones y la ampliación de la matrícula, expresa Robles Segura Por el momento no se han recortado gastos, asegura
KARINA AVILES
El contralor interno de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), Raúl Robles Segura, señaló que dada la "astringencia presupuestal" es necesario un ahorro en el gasto mediante la no contratación de personal y el mejor rendimiento de los recursos. Apuntó que la restricción de fondos ha limitado varias actividades de la institución, porque "hemos dejado pasar algunas investigaciones" y se han dejado "de hacer ampliaciones" a la matrícula.
Por otra parte, Robles Segura rechazó que exista una partida discrecional manejada por el rector: "No existe, y conociendo la forma de pensar del rector De la Fuente, si él hubiera encontrado (algo) hubiera pedido su cancelación. Ningún gasto (en la UNAM) se ejerce de manera discrecional", subrayó.
En entrevista, el contralor apuntó que la universidad ha ejercido "poco menos" de los recursos previstos. "Al 30 de junio deberíamos llevar ejercido 50 por ciento del gasto, si nuestras erogaciones fueran rigurosamente proporcionales al año. La verdad es que hemos aplicado un poco menos, lo cual no significa que hayamos desarrollado menos actividad, sino que probablemente hemos sido un poco más eficientes en nuestro gasto. Llevamos ejercido, aproximadamente, 48 por ciento de lo previsto para el total del año."
-Señala que se necesita hacer un ahorro en el gasto, Ƒesto será mediante la reducción de plazas? -se le preguntó.
-No exactamente. No se trata de reducir plazas, sino tal vez de no contratar personal, pero fundamentalmente pedir a catedráticos e investigadores un esfuerzo mayor, de manera que por cada peso podamos tener un mejor rendimiento.
En ese sentido, recordó que la UNAM gasta 80 por ciento de sus recursos en salarios y prestaciones. Dijo que la universidad, "afortunadamente", no ha necesitado llegar al extremo de recortar el gasto a sus dependencias.
"Pero hemos dejado de hacer ampliaciones, hemos dejado pasar algunas investigaciones. Simplemente nuestra actividad pudiera ser más rica, más fructífera y basta, pero la astringencia presupuestal nos está limitando de alguna manera."
Tras manifestar que "se han dejado de hacer ampliaciones", mencionó que en la UNAM y en el resto de las universidades públicas la capacidad está saturada. "Si bien es cierto que han crecido de manera importante, tal vez no lo han hecho en la misma proporción que ha crecido la necesidad.
"Por ejemplo, de 1970 a 1985 la matrícula en las universidades públicas creció 26 veces, pero aun así, pese a ese crecimiento espectacular, mucha gente no tuvo acceso. Si estamos gastando más en salarios y prestaciones tenemos que ser más eficientes en el desempeño de estos servicios, para que con la misma cantidad de recursos podamos tener una cobertura más amplia", añadió.
Por último, recordó que la Auditoría Superior de la Federación efectuó la revisión de la cuenta pública de 2000, y aunque hubo algunas observaciones "de menor importancia" en cuestión de la cobertura oportuna de trámites, es decir, faltas administrativas, la universidad salió bien. Si hoy se tuviera que emitir el dictamen dicho órgano, éste sería satisfactorio.