Agradece Rivera a gobiernos facilitar la visita pontificia
El beso de Fox al anillo papal "no tiene la menor importancia"
El presidente humilló la investidura que porta: Cárdenas
KARINA AVILES
El beso que dio el presidente Vicente Fox al anillo del pescador del papa Juan Pablo II "no tiene la menor importancia". Pensar lo contrario es "querer formar un problema, como si México no tuviera otros muchos problemas que resolver", insistió el cardenal Norberto Rivera Carrera.
Tras su homilía en la catedral metropolitana, el arzobispo primado de México minimizó el acto con el que, según diversas opiniones, el Ejecutivo federal mexicano sometió su investidura al Estado Vaticano.
Durante la misa Rivera agradeció a Dios y a los gobiernos federal y capitalino los trabajos para hacer posible la quinta visita de Karol Wojtyla.
Para algunos, dijo, quizá sólo es fenómeno sociológico o dato estadístico o "intromisión del Papa en cuestiones políticas y sociales", pero para Dios, que quiere salvar a todos los hombres y a todo el hombre, sencillamente es el anuncio y la realización de la salvación en su dimensión temporal y eterna, subrayó.
En distintas ocasiones, el cardenal agradeció a Dios "porque su santidad ha venido no sólo a compartir unos panes, sino su propia vida desde las limitaciones físicas, y desde el dolor y con su ejemplo nos ha dejado clavada la pregunta: Ƒcómo y con quiénes comparto el banquete de mi vida?; Ƒa quiénes siento a mi mesa: la de mi tiempo, mi amistad, mis bienes, mis intereses, mis palabras y proyectos?; Ƒa quién excluyo y por qué?"
Habló del simbolismo de la comida compartida, cuya máxima expresión se encuentra en la narración de la primera multiplicación de los panes, la cual, dijo, es buena síntesis de algunos rasgos fundamentales del estilo de vida y la personalidad de Jesús.
Por otra parte, Cuauhtémoc Cárdenas, ex jefe de Gobierno capitalino, insistió en que el beso del presidente Fox al anillo de Juan Pablo II fue una actitud de "un mandatario humillado, un presidente doblado que humilló la investidura que porta".
En el contexto del segundo informe del coordinador perredista en la Cámara de Diputados, Martí Batres, el ex candidato presidencial del PRD sostuvo que pese a las actitudes de Fox, el Estado mexicano es y seguirá siendo laico "mientras no se cambie la Constitución, y no creo que se vaya a cambiar".
Por otra parte, consideró importante la cancelación del proyecto del aeropuerto en Texcoco, pues la obra, dijo, iba a ser muy costosa para la ciudad y el país.
También entrevistado en el informe de Batres, el priísta Manuel Jiménez Guzmán -quien fue gran maestro de la Logia Masónica y presidente de la masonería de América- criticó a Fox, pues su actitud de "sumisión" a una iglesia sin duda ha ofendido a otros grupos religiosos y no religiosos que no comparten el haber privilegiado a la Iglesia católica.
Coincidió en la necesidad de que el Congreso de la Unión emita un extrañamiento por la "sumisión" del jefe del Estado Mexicano a "su par", el jefe del Estado Vaticano, "que es Juan Pablo". Pero también sugirió que la Secretaría de Gobernación debería actuar para aplicar una sanción por la violación de la ley de Asociaciones Religiosas y Culto Público.
Tras señalar que no se trata de cuestionar la visita de Juan Pablo II, Jiménez Guzmán destacó que el Presidente debió ser prudente, pues su actitud puede desatar actitudes de confrontación religiosa, "lo cual es una de las cosas peores" que pueden suceder.
Consideró que si la religión del Presidente le implicaba besar la mano al Papa, para eso hay templos, pues es una actitud privada y no pública como la que representó la ceremonia de bienvenida del jefe del Estado Vaticano.
Señaló que en México la población no católica es creciente y en la actualidad alcanza ya a 12 millones de mexicanos a quienes preocupa la violación de la Ley de Asociaciones Religiosas y Culto Público.
CON INFORMACION DE ALONSO URRUTIA
