Es horroroso haber vivido tanto, dice quien es conocida como la directora favorita de Hitler
La cineasta Leni Riefenstahl cumplirá mañana cien años
DPA
Hamburgo, 20 de agosto. Para Leni Riefenstahl es "horroroso" haber vivido tanto y mejor hubiera sido haber muerto el día que estalló la Segunda Guerra Mundial, según declaró la cineasta alemana en una entrevista concedida a la televisión con motivo de su cumpleaños número cien, que se celebrará el 22 de agosto.
La directora favorita de Adolf Hitler y realizadora en actividad más anciana del mundo ha pensado muchas veces poner fin a su vida. Sin embargo, y en algo poco característico para esta mujer que se declara impulsiva y compulsiva, nunca tuvo el valor suficiente para suicidarse.
"Es horroroso", dijo a una renombrada entrevistadora de la emisora ZDF a la pregunta de cómo se sentía ser casi centenaria. "Mal", agregó con signos visibles de amargura.
"Triste. Es triste haber sido etiquetada con el sello del nazismo para toda la vida, mientras mi visión es tan contraria a todo eso."
Riefenstahl dijo que "tendría que haber muerto el día que estalló la guerra. Recuerdo que había estado paseando y acababa de escalar una montaña y estaba descendiendo cuando el cuidador del parque subió corriendo y me gritó 'šLeni, estamos en guerra!' Ahí es cuando tendría que haber muerto. En la cima de mi carrera artística. Desde entonces todo ha ido cuesta abajo, literalmente en aquel día y trágicamente para mí desde aquel día".
Se regaló un documental
Riefenstahl se ha regalado en su cumpleaños un nuevo documental titulado Impresiones bajo el agua, en el que muestra durante 45 minutos imágenes captadas durante las más de dos mil incursiones que ha realizado, pese a su avanzada edad, en las profundidades del océano Indico entre 1974 y 2000.
También con motivo del cumpleaños fue anunciado que una delicada orquídea de montaña color amarillo brillante será bautizada Zygostates Riefenstahliae en honor de la realizadora.
Riefenstahl lucía muy juvenil para sus años y contestaba con soltura a su interlocutora, una periodista famosa por sus preguntas incisivas.
"Usted contó en sus memorias de 900 páginas que Hitler la quiso besar. ƑPor qué cree que se enamoró de usted?", preguntó la entrevistadora Sandra Maischberger.
Sólo una relación laboral
"Me preguntó si me podía besar", la corrigió. "Eso no quiere decir que estuviera enamorado de mí."
"ƑSentía atracción sexual por Hitler?" No, fue la respuesta inmediata. "Ni siquiera un poquito. No era mi tipo, absolutamente. Tuvimos una relación laboral muy breve. Hice esos dos filmes para él y después le arranqué la promesa de que no haría ninguno más", aseguró.
Las dos películas a las que se refería eran El triunfo de la voluntad, sobre el congreso del partido nazi en Nuremberg, en 1934, y Olympia, sobre los Juegos Olímpicos de Berlín, en 1936, las cuales fueron numerosamente premiadas dentro y fuera de Alemania.
Como ha hecho de forma constante, Riegenstahl negó también en esta entrevista que hubiera querido hacer propaganda con El triunfo de la voluntad. La cinta está prohibida en Alemania hasta hoy, ya sea en teatro o video.
"Soy una artista, una artesana, una cineasta diligente y completa que no se conforma con calidad de segunda. Ese es mi talento y ha sido mi perdición. Hitler no me hizo famosa. Yo era famosa desde antes gracias a La luz azul (su debut cinematográfico)", precisó.