Como jugador lo superé, le metí
seis goles, afirma el Pentapichichi
No permitiré que LaVolpe dirija la selección:
Sánchez
Admite que su contrato le impide criticar a dirigentes
de Pumas
ABRIL DEL RIO
Hugo Sánchez advirtió que "por mi educación"
era impronunciable la respuesta que merecía el argentino Ricardo
Lavolpe por los embates que le lanzó.
Si
bien guardó cierta mesura en la continuación del añejo
pleito entre ambos técnicos, que se encontrarán el domingo,
cuando Pumas reciba a Toluca, el Pentapichichi aseveró que
"yo me encargaré de que este sujeto nunca dirija a la selección
nacional".
Sánchez tuvo toda la noche para meditar el discurso
que aguardaban el triple de representantes de los medios que cotidianamente
cubren la práctica en CU.
Era evidente la curiosidad, el morbo ante lo que el siempre
polémico Hugo contestaría al hombre que ha cuestionado su
capacidad como técnico y que, entre otras cosas, lo ha acusado de
rechazar a los extranjeros que militan en el balompié mexicano,
pero en cambio cuenta con varios en su plantel.
Hugo Sánchez abordó cada punto, y en principio
aseguró que no podía existir rivalidad deportiva con LaVolpe,
a quien como jugador superó, pues el ex arquero argentino "tuvo
la suerte de que le haya metido seis goles en una temporada.
"Se hizo famoso con eso, porque no creo que haya sido
por ser el tercer portero (suplente) de un Mundial", dijo en alusión
al título que Argentina consiguió como anfitrión en
1978.
Descartó también la comparación como
técnicos, pues "él tiene experiencia de ¿40 años?,
al menos es lo que aparenta, y yo tengo apenas dos", lapso en el que suman
dos empates (LaVolpe al frente del Atlas) y un triunfo de Pumas (2-0) al
Toluca en la campaña anterior.
"¿Dónde está la experiencia? (de
LaVolpe). Si se traduce en años debería ganar 5-0 a todos
los equipos que yo dirija. Con datos hay que hablar; sin ellos, mejor calladito",
apuntó.
Hugo reiteró su aprecio a aquellos que se suman
al futbol del país y su desacuerdo con los que se naturalizan sólo
con la intención de ocupar las plazas de nacionales en los equipos,
así como a los clubes que estimulan esa práctica.
"Estoy orgulloso de ser mexicano y he sido extranjero
en España y otros países. Nunca me naturalicé para
sacar provecho o quitarle el trabajo a un español. Jugué
por méritos propios y demostré estar mejor que algún
local.
"Todos los extranjeros son bienvenidos, pero los puestos
hay que ganárselos", dijo y comentó que si fuera técnico,
"los naturalizados tendrían derecho a demostrar que son mejores
en una u otra posición que los mexicanos, y lo tomaría en
cuenta. Pero no hay que caer en trampas.
"Los foráneos tienen derecho de ganarse la vida
dignamente en México, pero si vemos comportamientos como este sujeto
(LaVolpe), como el otro (argentino Pablo Centrone) que golpeó a
un periodista en León, ¡por favor!
"No voy a permitir que este individuo quiera venir a engañar
para dirigir a la selección nacional. Voy a ser el primero en oponerme.
Los directivos conocen sus antecedentes: trata a los jugadores como animales,
como esclavos, y hay muchos que lo pueden confirmar", recalcó, y
recordó que incluso una vez lo retó a golpes en Austria.
Finalmente Sánchez reconoció que su contrato
incluye una cláusula que lo compromete a no hablar contra los directivos
de Pumas. "No es algo que me dé vergüenza. Me costó
muchísimo trabajo aceptarlo, pero pudo más mi deseo de estar
aquí, de cumplir con lo que me había propuesto.
"El contrato (formulado) de esa manera vence en diciembre
y ya veremos qué pasa, mientras tanto, a trabajar", concluyó.