El partido promoverá cambios en el sector
sin modificar la Constitución, anuncia
La discusión sobre la reforma eléctrica
radica en el Congreso, no en Los Pinos, dice Jesús Ortega
Advierte que si Vicente Fox negoció con el tricolor,
ambos pagarán un alto costo político
ANDREA BECERRIL
Para los senadores del PRD no es prioritario en estos
momentos acudir a Los Pinos, pues la discusión sobre la reforma
eléctrica debe darse en el Congreso, advirtió el coordinador
Jesús Ortega, tras inaugurar el foro Planeación, ejecución
y control de la industria petrolera en México. Se espera que
en los próximos días, dijo, el jefe del Ejecutivo haga llegar
sus otras propuestas encaminadas a abrir también al capital privado
la explotación de gas y la refinación petrolera.
Expresó
su confianza en que en el Senado la mayoría de los legisladores
no aceptaría un acuerdo de las cúpulas de PRI y PAN para
privatizar la electricidad. Los perredistas tratarán de hallar consensos
en torno a una iniciativa propia en la materia, en la que se propone modernizar
la Comisión Federal de Electricidad (CFE) y Luz y Fuerza del Centro
sin cambiar la Constitución.
Opinó que las expresiones de Diego Fernández
de Cevallos, de que el PRD es "un grupúsculo que no impedirá
la reforma eléctrica", constituyen "una posición intolerante"
que contrasta con los planteamientos del panista cuando estaba en la oposición.
"Entonces decía exactamente lo contrario; exigía incluso
que se debía tomar en cuenta la opinión de las minorías,
pero ahora que su partido está en el poder cambió de parecer
y pasó por encima de las tesis de los teóricos del PAN, como
Gómez Morín."
Al participar en el foro, Ortega expresó que los
senadores del PRD están conscientes de que el sector energético
requiere una reforma integral, pero no para "destruir la industria eléctrica
y petrolera" ni para favorecer intereses particulares que no son los de
los mexicanos.
"Este debate que hoy es intenso, seguramente continuará
y si bien está concentrado en la electricidad, en pocas semanas
estará acompañado por las propuestas de reforma al sector
de hidrocarburos." Será bueno, agregó, que se confronten
abiertamente las posiciones.
Resaltó que se trata de un debate fundamental,
pues está en juego el futuro de los recursos estratégicos
nacionales, del petróleo, el gas y la electricidad, de los que depende
que México se convierta en un país soberano y garantice a
sus ciudadanos una vida digna.
En el foro, en el que participaron técnicos y trabajadores
de Pemex, Ortega hizo notar que la petrolera es una industria fundamental
para el país; por ello el PRD insistirá en que se sigan las
pesquisas sobre el presunto desvío de recursos de la paraestatal
a la pasada campaña presidencial del PRI.
"Debemos ser muy acuciosos para impedir que se siga utilizando
Pemex como la caja chica del gobierno, o como instrumento para financiar
actividades políticas de diversa índole. Es gravísimo,
no se puede tolerar más que se dilapiden los recursos de la industria
petrolera para en el pago de actividades perversas, que nada tienen que
ver con el desarrollo energético del país."
Advirtió que si el gobierno de Fox negoció
con la dirigencia del PRI el voto en favor de la iniciativa para privatizar
el sector eléctrico a cambio de olvidarse del llamado Pemexgate,
tendrá fuerte costo político tanto para los priístas
como para el gobierno federal y el PAN.