Acusan al presidente de recibir dinero de madereros
Dispersa la policía con gases y balas de goma
una protesta contra Bush
AFP Y REUTERS
Los Angeles, 23 de agosto. La policía estadunidense
usó gases lacrimógenos y balas de goma el jueves por la noche
en Portland, Oregon, contra manifestantes que protestaban contra un plan
presidencial que tiende a facilitar la explotación forestal para
luchar contra los incendios, según informó la televisión
local.
De acuerdo con la cadena KPTV, por lo menos 2 mil manifestantes,
militantes ecologistas, jóvenes la mayoría, se reunieron
cerca del hotel en donde el mandatario debía pasar la noche.
Según
la policía de Portland, citada por el diario local The Oregonian,
la brigada anti-motines recurrió a los gases lacrimógenos
durante la tarde y a las balas de goma, después de que los manifestantes
se negaron a obedecer una orden para dispersarse.
"En mayo de 2000 Bush batió todos los récords
de recaudación de fondos en Oregon aceptantdo enormes sumas de dinero
de ricos directivos de compañías madereras", afirmó
la asociación Cascadia Fortes Alliance, uno de los grupos ecologistas
que organizaron la manifestación.
Por su parte, Bush declaró a los periodistas que
"es una verdadera lástima -mientras visitaba un bosque quemado en
Oregon-. Si hubiéramos cuidado bien nuestros bosques, la devastación
causada no habría sido ni la mitad de grave de lo que ha sido".
Bush acaparó toda la atención en cuanto
a la batalla contra los incendios en Oregon al revelar su plan de acción
forestal que, se-gún dijo, "acabará con las lentas tramitaciones
y los interminables litigios", dando a las compañías madereras
un mayor acceso a los bosques federales para quitar los árboles
enfermos y ramas secas que suponen una amenaza.
Los cambios normativos propuestos se aplicarían
en una elevada cantidad de hectáreas de bosques y tierra de campo
especialmente vulnerables a los incendios. Bush dijo que el plan salvaría
vidas, propiedades y podría crear más de 100 mil empleos.
"Podemos poner en marcha políticas que beneficiarán
al medio ambiente y, al mismo tiempo, a los ciudadanos -indicó Bush
en Portland durante un acto público-. Hay demasiados trámites,
demasiadas normativas y regulaciones".
Los críticos dijeron que el plan forestal supone
un desprecio al medio ambiente y pretende únicamente favorecer a
la industria maderera.