SEGUNDO INFORME
Protesta en el Zócalo
El FZLN rechaza la ley indígena y exige el fin de la represión
JOSE ANTONIO ROMAN Y ANGELES CRUZ
Con la exigencia de poner alto a la represión en Chiapas, el Frente Zapatista de Liberación Nacional (FZLN) realizó en el Zócalo un gigantesco periódico mural en el que decenas de ciudadanos expresaron lo que a su parecer han sido los dos años de gobierno del presidente Vicente Fox.
Al mismo tiempo, afuera del Senado de la República un representante del frente zapatista leyó una denuncia sobre el hostigamiento y represión que viven las comunidades indígenas en Chiapas, que tan sólo en días recientes han cobrado cinco víctimas.
En un mitin que duró más de dos horas, dicha organización presentó una larga lista de hechos documentados de violaciones a los derechos humanos de habitantes de la zona zapatista. En muchos casos los responsables son elementos del Ejército y organizaciones paramilitares que incluso han sido plenamente identificadas, sin que se ejecute alguna acción penal por parte de las autoridades.
En el Zócalo, a un lado del asta bandera, fueron colocadas sobre el piso varias pancartas con la exigencia reiterada del FZLN de detener la represión en aquella entidad, sobre todo en la región de Montes Azules. Además expresaron su rechazo a la "falsa" ley indígena que aprobó el Congreso y el gobierno foxista, y se exigió respeto a los acuerdos de San Andrés.
Junto con las pancartas y decenas de informaciones periodísticas sobre el desempeño del gobierno del presidente Fox también fueron colocados sobre el piso varios pliegos de papel donde los transeúntes podían expresar sus opiniones sobre el actual gobierno federal.
A dos horas de iniciado el acto se ha-bían ocupado ya cuatro pliegos de unos diez metros cada uno, en los que mayoritariamente había palabras de reprobación al gobierno. El desempleo, el crecimiento de la pobreza, la "entrega" del país al capital extranjero, el deterioro de la educación y la vulnerabilidad del Estado laico fueron algunos de los muchos comentarios estampados en los pliegos de papel.
Ni la pregunta de "Ƒdónde quedó el cambio?" ni múltiples insultos faltaron en esos pliegos, escritos muchos de ellos con faltas de ortografía por decenas de ciudadanos.