Sueño de una tarde dominical en la Alameda Central
El mural de Rivera no será trasladado, informa el INBA
MERRY MAC MASTERS
El sueño siempre no se perturbó. El mural Sueño de una tarde dominical en la Alameda Central, de Diego Rivera, permanecerá en el museo homónimo creado para albergarlo en 1986, tras la destrucción de su hogar original, según informó ayer el Instituto Nacional de Bellas Artes (INBA), custodio de la obra.
Hace dos semanas el Gobierno del Distrito Federal (GDF) manifestó su interés de trasladar el mural pintado en 1947 para el Hotel del Prado, dañado por los sismos de 1985, a una plaza pública que se construye en el predio donde estuvo el hotel Alameda, también destruido por ese desastre natural. Las protestas no se hicieron esperar.
Como indicó en su momento Saúl Juárez, titular del INBA, el instituto tiene el deber de analizar toda solicitud recibida por parte de instituciones privadas o públicas. De acuerdo con el escueto comunicado, después de estudiar la propuesta hecha por el GDF sobre el posible traslado del mural como parte del proyecto de construcción de la Plaza Juárez, ''se decidió de común acuerdo que el mural de Diego Rivera permanezca en un museo como el que actualmente lo alberga, en la medida en que para su protección se requiera de condiciones técnicas especiales".
Sin embargo, el INBA ''hace patente su reconocimiento al GDF por emprender programas que propicien la convivencia en esa importante zona de la ciudad como parte del proyecto de rescate del Centro Histórico''.