Los ojos del mundo, en el Ejecutivo, dice Kimberly Stanton
Fox debe cumplir acuerdos internacionales: consultora
El Estado mexicano no puede renunciar al Convenio 169
JIM CASON Y DAVID BROOKS CORRESPONSALES
Washington, 6 de septiembre. El gobierno mexicano tiene obligaciones en materia indígena que incluso constan en acuerdos internacionales, y en virtud de que la normatividad vigente no atiende esos compromisos, el presidente Vicente Fox debe asumir su responsabilidad y enmendar este vacío, indicó Kimberly Stanton, directora adjunta de la Oficina para América Latina (WOLA, por sus siglas en inglés).
La funcionaria comentó a La Jornada que la decisión de la Suprema Corte mexicana de no revisar la reforma indígena aprobada por el Congreso en abril del año pasado confiere al Ejecutivo la responsabilidad de cumplir con los acuerdos en materia de derechos indígenas contraidos con la ratificación del Convenio 169 de la Organización Internacional de Trabajo.
Por lo tanto, Stanton señaló que las expectativas ahora se centrarán en las medidas que adoptará Fox para resolver el tema que él puso al centro de su oferta política, y que continúa sin atención tanto en Chiapas como en el resto del país: el pleno respeto a los derechos de los pueblos indígenas.
''Queda claro que la actual ley mexicana es muy corta para cumplir con las obligaciones mexicanas previstas en la ley internacional'', afirmó Stanton. La denominada reforma indígena, explicó, no cumple con las obligaciones internacionales establecidas por el Convenio 169 de la OIT, por lo menos en lo relativo a tres grandes rubros: el derecho de los indígenas a poseer las tierras que habitan tradicionalmente, el derecho de los pueblos indígenas a establecer las prioridades para su propio desarrollo económico, social y cultural, y el reconocimiento de que es responsabilidad del gobierno cumplir con estas normas.
La llamada reforma indígena mexicana indica que serán los gobiernos estatales los responsables de reconocer los derechos de sus pueblos indígenas, con lo que se niega así la potestad adquirida por el gobierno federal en los acuerdos internacionales.
Stanton señaló que el asunto de la posesión de la tierra sigue siendo el eje de las luchas indígenas, incluyendo la del EZLN, y el paquete de cambios constitucionales del Congreso no logra resolver eso de fondo.
Por lo tanto, la interrogante es qué hará Fox más allá de esta legislación, y eso será lo que muchos observadores internacionales preocupados por los derechos humanos estarán evaluando.
''Estaremos esperando más acción de su parte'', dijo Stanton.
En cierta medida, añadió, la actual reforma es más un obstáculo que un avance para resolver el conflicto en Chiapas y otras regiones.
Lo que decida hacer Fox definirá las condiciones para retomar las negociaciones en el proceso de paz, consideró la experta en derechos humanos en América Latina. ''Nosotros tendríamos la esperanza de que Fox se comprometa a avanzar en el proceso de paz'' en Chiapas, concluyó.