El militar cayó "en un estado de enajenación mental", argumenta magistrada

Exonera juez al ex dictador Augusto Pinochet de crímenes cometidos durante su régimen

Abogados apelarán de la "apurada e ilegal" decisión de la justicia chilena

Aún pendiente, proceso por el asesinato del general Carlos Prats y su esposa

ENRIQUE GUTIERREZ Y AGENCIAS CORRESPONSAL

Santiago, 23 de septiembre. Una juez chilena siguió los pasos de la Suprema Corte de Justicia y este lunes sobreseyó definitivamente el proceso del ex dictador Augusto Pinochet por crímenes cometidos bajo su régimen, entre 1973 y 1990.

La magistrada Gabriela Corti, quien investigaba siete querellas en contra del ex dictador, cerró el caso acogiendo lo dictaminado por el máximo tribunal del país, que libró a Pinochet, de 86 años de edad, de un proceso paralelo por presentar un estado de enajenación mental que le impide enfrentar un juicio.

"Se concluye que el querellado, Augusto Pinochet Ugarte, cayó después de cometidos el o los delitos que se le imputan en estos autos en un estado de enajenación mental. Ello atendido en la pericia médico-legal que le fue practicada por un equipo de médicos especializado en la materia", plantea el dictamen judicial.

"Por estas consideraciones (...) se sobresee parcial y definitivamente al querellado", agregó la resolución, según Reuters.

La juez Corti fue designada especialmente por la Corte de Apelaciones de la ciudad costera de Valparaíso, situada a unos 140 kilómetros al oeste de Santiago, para investigar la desaparición y asesinato de Jaime Aldonay, Miguel Woodward y otros casos ocurridos en la comuna de Quillota, cercana a dicho puerto, en los los primeros años de la dictadura de Pinochet.

Además de los casos Aldonay y Woodward, la magistrada Corti investiga el fusilamiento de ocho personas y la desaparición de dos a manos de una patrulla militar de la Escuela de Caballería de Quillota. Los desaparecidos son Juan Pablo Gac y Rubén Cabezas, mientras que Hugo Hernán Aranda Bruna, Julio Arturo Loo Pardo, Osvaldo Manzano Cortés, Víctor Enrique Fuenzalida Fuenzalida, Angel Mario Díaz Castro y Manuel Hernán Hurtado Martínez fueron ejecutados.

Paralelamente a esa investigación, el magistrado Juan Guzmán acumuló 500 querellas contra el general retirado, a quien procesó por los crímenes de la llamada Caravana de la muerte, comitiva militar que recorrió el país eliminando a opositores de Pinochet un mes después del golpe militar de 1973.

Sin embargo, la Corte de Apelaciones de la capital exculpó al octogenario militar en agosto de 2001, aduciendo la única vía judicial que abre la ley penal chilena para que un inculpado pueda evadir un juicio: que sea declarado "loco" o "demente".

Ese dictamen fue ratificado por la Suprema Corte el primero de julio de 2002.

La resolución del tribunal de Valparaíso fue rechazada por los abogados querellantes, quienes reclamaron la decisión ante la propia Corte de Apelaciones de Valparaíso, que deberá dirimir en pleno si mantiene o modifica lo determinado por la juez Corti.

"Es una resolución apurada y que cae indiscutiblemente en la ilegalidad, por lo que inmediatamente hemos apelado", dijo a Reuters el abogado acusador, Hugo Gutiérrez.

Para los querellantes, la investigación aún no está agotada, pues la juez nunca interrogó a Pinochet. Además estiman que para exonerar al ex dictador éste debió ser juzgado primero por los crímenes que se le imputan y no sólo ser procesado como aparece en esta causa.

Pero fuentes judiciales estiman poco probable que el tribunal de apelación revierta la resolución de la juez, contraviniendo lo dictaminado por la Suprema Corte de Justicia.

Junto con estos procesos, Augusto Pinochet enfrenta una solicitud de la juez argentina María Servini de Cubría para despojarlo de su fuero como ex gobernante para interrogarlo sobre el asesinato de su antecesor en el mando del ejército chileno, el general Carlos Prats, y su esposa, ocurrido en Buenos Aires en 1974.

Hace unas semanas trascendió en la prensa que la petición argentina habría sido rechazada por la Corte de Apelaciones de Santiago, lo que debería ser ratificado oficialmente en pocos días.

En otro asunto, un corte generalizado de energía eléctrica afectó este lunes gran parte del país, incluida la capital, donde personas quedaron atrapadas en elevadores. De acuerdo con reportes, en las calles se presentó un grave congestionamiento vehicular, debido a que los semáforos no funcionaban, reportó la agencia Dpa.

Al parecer el apagón se debió a problemas en las líneas de transmisión del sistema interconectado central, que alimenta de energía a más de 90 por ciento de la población de Chile.