Podría tener una bomba atómica en dos años, asegura documento británico
Irak está listo para lanzar ataques biológicos y químicos en sólo 45 minutos, afirma Tony Blair
Elogia Bush al primer ministro laborista; el informe, "repleto de mentiras", dice Bagdad
REUTERS, AFP Y DPA
Londres, 24 de septiembre. Buscando demostrar por qué apoya una eventual acción militar contra Irak, el primer ministro de Gran Bretaña, Tony Blair, difundió hoy un informe según el cual el presidente de ese país árabe, Saddam Hussein, está "listo" para lanzar ataques con armas biológicas y químicas en apenas 45 minutos, y sostuvo que incluso podría llegar a disponer de una bomba atómica en dos años.
Al presentar el informe ante el Parlamento británico, convocado para un debate de emergencia sobre el tema, Blair aseguró que el mandatario iraquí es un "dictador cruel y sádico", cuyo programa de armas nucleares, biológicas y químicas está activo y "en plena expansión", por lo que es necesario impedírselo de "una u otra forma".
El presidente estadunidense, George W. Bush, no escondió su entusiasmo ante el informe del laborista, al afirmar que "Blair es un dirigente fuerte y yo admiro su voluntad de decir la verdad", mientras que Bagdad calificó el informe de "alarmista" y "repleto de mentiras".
Además, Irak respondió asegurando, a través del asesor presidencial Amir al Saadi, que los expertos de armas de la Organización de Naciones Unidas (ONU) -que tienen previsto regresar a Bagdad a mediados de octubre tras una ausencia de cuatro años- tendrán "acceso irrestricto" a sus instalaciones.
Por su parte, el canciller iraquí, Naji Sabri, afirmó que "estamos dispuestos a facilitar la visita" de un equipo de expertos británicos en armas a "todos los lugares" que deseen, incluyendo los señalados por Blair en su informe.
Bagdad podría fabricar un arma atómica en uno o dos años, advierte el informe, el cual aclara que no es posible producirla si se mantienen las sanciones actuales im-puestas por la ONU al país árabe después de la invasión iraquí a Kuwait, en 1990.
Por ello, intentó comprar "cantidades im-portantes" de uranio en Africa, "cuando ningún programa nuclear civil lo justifica", mientras que "intentó adquirir clandestinamente tecnología y materiales que podrían ser utilizados en la producción de armas nucleares", agregó.
Asimismo, el régimen iraquí ha conservado hasta 20 misiles Al Hussein fabricados a partir de misiles Scud soviéticos, capacitados para transportar cargas químicas y biológicas, además de que ha comenzado la producción de misiles Ababil 100 y ha desplegado misiles Al Samud.
Parte de este programa de armas está financiado con ingresos ilegales que escapan al control de la ONU, como el tráfico de divisas, asegura el documento.
Al menos una parte de las armas de exterminio masivo puede ser desplegada en 45 minutos, concluye el expediente de 55 pá-ginas, que se basa principalmente en informes de los servicios de inteligencia.
"No es que emprenderíamos una acción militar por el hecho de lanzarla. Pero es perentorio garantizar el desarme iraquí", dijo Blair al Parlamento.
También afirmó no tener dudas de que Irak y los países vecinos estarían mucho mejor sin Saddam Hussein, y sostuvo que "junto a la diplomacia debe haber una genuina preparación y planificación para emprender acciones (militares) si la diplomacia fracasa".
El documento contiene pocos datos que puedan tomarse como nuevas pruebas contra el régimen de Hussein, pero intenta destacar la amenaza que significa Irak.
Blair, el único líder político occidental que ha dado un apoyo irrestricto al presidente Bush en su "guerra contra el terrorismo internacional", espera usar el informe para ganarse a los escépticos de su Partido Laborista, renuentes a respaldar una acción militar contra Bagdad.
Más de 160 miembros del Parlamento de 659, la mayoría de ellos laboristas, han firmado una moción en los últimos meses donde expresan su "profunda molestia" por el respaldo británico a los ataques militares a Irak, particularmente si la ONU no los respalda explícitamente.
Además, mientras Blair pronunciaba su discurso, decenas de personas se congregaron frente a la Cámara de los Comunes para manifestar su rechazo a una eventual operación bélica contra Irak.
En Estados Unidos, mientras Bush elogiaba a Blair, el portavoz de la Casa Blanca, Ari Fleischer, precisaba que los elementos que dispone Washington "coinciden" con los reunidos por Gran Bretaña, al tiempo que descalificaba las críticas de que el estudio carece de nuevas evidencias o pruebas concluyentes.
"El problema con las armas humeantes (pruebas concluyentes o smoking guns) es que solamente humean luego de ser disparadas, y no queremos dejar que Saddam Hussein dispare ningún arma más", señaló Fleischer. El informe británico es "aterrador", concluyó Fleischer.
Bush aprovechó para llamar nuevamente al Congreso a actuar rápidamente y darle carta blanca para un eventual ataque a Irak, mientras un sondeo de CNN-USA Today-Gallup, divulgado este martes, mostró que 57 por ciento de los estadunidenses consultados estaría a favor de enviar tropas a Irak, mientras que 38 por ciento señaló su oposición a tal acción.
El respaldo para invadir Irak asciende a 79 por ciento si Estados Unidos consigue el respaldo de la ONU.
De acuerdo con un informe de los demócratas del Comité de Presupuesto de la Cámara, el costo para Estados Unidos de un ataque contra Irak podría ascender a 200 mil millones de dólares, e incluso el doble si el conflicto dura más de dos meses.
Por su lado, el presidente francés, Jacques Chirac, afirmó en Copenhague que su país tiene "indicios" de la posesión de armas de destrucción masiva por parte de Irak, pero insistió en que sólo el retorno de los inspectores de la ONU permitiría aportar pruebas concluyentes.
Además, sostuvo que ofrecerá una "resistencia total" a una nueva estrategia estadunidense basada en ataques militares preventivos, acciones bélicas que podrían llevar a los "peores excesos".
Advierte China de "graves consecuencias"
También presente en el Foro de Cooperación Asia-Europa, el presidente chino, Zhu Rongji, declaró que cualquier acción militar contra Irak sin autorización de la ONU traería consigo "graves consecuencias".
Por otro lado, Blair y el canciller federal alemán, Gerhard Schroeder, mantuvieron una reunión informal en Londres, durante la cual discutieron sobre va-rios temas internacionales, entre ellos Irak.
"Esta visita es una bueña señal. Tony Blair mantiene buenas relaciones tanto con Schroeder como con el presidente estadunidense", estimó Bernhard May, de la Sociedad Alemana de Política Exterior, en mo-mentos en que Washington continúa profundamente irritado por la negativa alemana a secundarlo en un ataque a Irak.
Washington, que evitó el lunes felicitar a Schroeder por su relección, hoy volvió a la carga: "Se dijeron cosas que, a juicio del presidente, fueron excesivas durante la campaña (electoral alemana) y levantan un sentido antiestadunidense y crítica de Estados Unidos", dijo Ari Fleischer.
"No vamos a pretender que los problemas no fueron creados por la conducta en esa campaña", añadió el funcionario.
Por último, en un intento por presionar a la ONU contra Irak, Bush dijo hoy que Hussein es peor con su pueblo que lo que el ex presidente yugoslavo Slobodan Milosevic fue con el suyo, y aseguró que "ha aterrorizado" a los iraquíes, durante una actividad de recaudación de fondos para el candidato republicano al Senado John Thune.