Habría ofrecido la empresa un "definitivo" 5.5%; "es probable que acepte el STPRM"
Pemex y sindicato estarían cerca de un arreglo
FABIOLA MARTINEZ
El gobierno habría endurecido su posición anoche al ofrecer al Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana (STPRM) un incremento salarial de 5.5 por ciento directo al salario y dos puntos en prestaciones. Fuentes cercanas a la negociación informaron que la propuesta de la paraestatal "es definitiva y, en este sentido, es probable que la acepte el sindicato".
Al cierre de esta edición no se había informado de manera oficial del acuerdo que evitaría la huelga en Petróleos Mexicanos (Pemex), programada para el primer minuto del próximo miércoles, por lo que se prevé que la firma del convenio de revisión salarial ocurra en el transcurso del fin de semana o "a más tardar el lunes".
Las fuentes consultadas expresaron que tras varias horas de negociación quedaron afinados los aspectos económicos y que, entrada la noche, funcionarios y dirigentes sindicales "conversaban sobre las consideraciones políticas y los detalles jurídicos del convenio. Esperamos que esa etapa progrese y no se nos vuelva a truncar el arreglo".
La versión anterior no fue rechazada en Pemex, la Secretaría del Trabajo y Previsiíon Social (STPS) o el STPRM, donde hasta anoche continuaban funcionarios y personal de guardia.
Diversos factores influyeron para que el sindicato analizara la posibilidad de aceptar el incremento salarial ofrecido por Pemex, significativamente inferior a la demanda de 15 por ciento, emitida desde el 15 de julio pasado al inicio del proceso de revisión.
Sin embargo, lo que moderó la posición del STPRM fue la actitud generalizada de los petroleros, incluso ante el Presidente Vicente Fox en su gira por Campeche y Nuevo León. Los trabajadores manifestaron su rechazo a protagonizar una huelga que "pondría en riesgo la fuente de empleo y la economía nacional".
Integrantes de la opositora Alianza Nacional Democrática de Trabajadores Petroleros (ANDTP) viajaron a la ciudad de México ayer para participar en la marcha en contra de la privatización de la industria eléctrica. Traslado que aprovecharon para dejar en claro "la simulación y el chantaje de Carlos Romero Deschamps y su gente al utilizar la huelga como medida de presión".
Prueba de ello, señalaron petroleros disidentes de las secciones 48 (Tabasco), 35 (centro), 11 (Nanchital, Veracruz), 24 (Salamanca, Guanajuato) y 26 (Las Choapas, Veracruz), es que a cuatro días de que venza el emplazamiento a huelga no se les ha informado sobre el monto económico del fondo de resistencia, la estrategia de los comités de huelga, la designación del personal de emergencia en caso de un paro ni han sido convocados a asambleas extraordinarias para definir un plan de acción.
"Apoyaríamos una huelga como legítimo derecho para defender la revisión salarial, pero la aborrecemos si de lo que se trata es de encubrir ilícitos personales de algunos dirigentes... Ningún petrolero quiere compartir con ellos la inmoralidad", expresó Julio César Rodríguez, presidente de la ANDTP.