El autor de Los cínicos no sirven
para este oficio dialogó con alumnos de la UNAM y ayer estuvo
en la Ibero
Cambiar el lenguaje marca el inicio de la guerra: Kapuscinski
Los medios dan cabida a palabras como ''odio y enemigo''
Siempre existe una preparación mental y emocional,
dijo
ANASELLA ACOSTA NIETO
El comienzo de las guerras no lo marca el primer disparo
con un arma de fuego, sino el cambio del lenguaje que se despliega en los
medios de comunicación, que da cabida a palabras como ''enemigo"
y ''odio", así lo muestra el pasado y lo corroboran en el presente
los grandes periódicos del mundo, expresó Ryszard Kapuscinski
ante estudiantes de la Universidad Nacional Autónoma de México
(UNAM).
Al atender a las preguntas que los universitarios le formularon
por escrito en torno de una eventual guerra emprendida por Estados Unidos
contra Irak, el periodista polaco explicó que previo a las actividades
militares -como ocurrió en los dos o tres años anteriores
a la Primera Guerra Mundial y a la de los Balcanes, en la ex Yugoslavia-,
siempre existe una preparación mental y emocional mediante la introducción
de un nuevo lenguaje en los medios de comunicación.
Algo se acerca
Ante el numeroso público que desbordó, de
forma literal, el auditorio de Humanidades, Kapuscinksi precisó
que palabras como ''enemigo", ''odio", ''liquidar", ''remover" y ''aplastar",
las que de forma paulatina comienzan a usarse ahora, denotan que ''algo
está acercándose".
La
conferencia de Kapuscinki en la UNAM estaba planeada en el auditorio Ricardo
Flores Magón de la Facultad de Ciencias Políticas, pero una
falla en los transformadores impidió el suministro de energía.
Los estudiantes se enteraron del cambio de sede el viernes
por la mañana, pero ello no impidió su arribo al auditorio
de la Coordinación de Humanidades, con capacidad para 190 personas
y, por lógica, insuficiente para el masivo alumnado de la Facultad
de Ciencias Políticas, más los agregados.
En el lobby y los pasillos de ese auditorio, así
como en el interior y exterior de su puerta principal se improvisó
un sistema de audio, que fue rodeado por grabadoras y estudiantes que se
confundían con reporteros en búsqueda del mejor sitio para
registrar las palabras del visitante de honor.
Los organizadores y directivos debieron instalar un circuito
cerrado en el auditorio del Instituto de Investigaciones Filológicas,
contiguo al de Humanidades, pero éste sólo dio cabida a casi
dos centenares de personas.
En tanto, con la tolerancia que le es característica,
Kapusckinsi esperaba a que todo estuviera dispuesto para que los ''inquietos",
entre los cuales muchos confesaron no haber leído libro alguno del
periodista polaco, pudieran escucharlo.
El escritor celebró ''el interés, la curiosidad
y sobre todo la madurez e inteligencia'' que reflejaban las preguntas de
los estudiantes.
Sobre las inquietudes manifestadas ante la guerra que
Estados Unidos ha anunciado en contra de Irak, Kapuscinski comentó:
si observamos el mapa del mundo podemos ver la dirección que tienen
las actividades militares estadunidenses y su concentración en ciertas
regiones que se caracterizan por poseer grandes reservas de petróleo.
Recordó que Arabia Saudita, Rusia y la región
que conforman Irak e Irán se perfilan como las zonas petroleras
más ricas del mundo. Las dos primeras naciones se deben descartar
como fuente de abastecimiento para Estados Unidos; el caso de Rusia ni
siquiera se puede concebir, mientras que la agudización del conflicto
con el Islam ha puesto en riesgo la posibilidad de que Arabia Saudita desempeñe
ese papel; la opción que resta serían Irak e Irán.
Por ello, reflexionó, el conflicto con Irak no
es un juego político, ni un conflicto diplomático. Estados
Unidos quiere garantizar su existencia en el futuro, pues es un poderío
que sólo puede funcionar si cuenta con suficiente petróleo,
de ahí la pretensión de establecerse de manera permanente
en la región.
Explicó que el lugar en el que Estados Unidos ha
fijado su atención está conformado por ''tierras vacías,
cuyos dueños son pequeñas tribus, estados muy débiles,
y eso es una invitación para que otros las gobiernen".
Agudo en sus comentarios, el periodista no descartó
que China, otra potencia con la ventaja de estar geográficamente
más cercana a esa región, trate de establecerse ahí,
pues también depende de las importaciones petroleras.
Pasividad y pereza de las sociedades
Kapuscinski dijo a los estudiantes que el periodismo debe
ejercerse con seriedad y responsabilidad, entenderse como una labor con
sentido y deber humanista, y como profesión de estudio permanente.
Se refirió a la ''culpabilidad" de las sociedades
en la forma de ejercer el periodismo en la actualidad, pues mantienen una
''actitud pasiva" y por ''pereza" no buscan alternativas -que sí
las hay- y se conforman con lo que tienen a la mano.
Sonriente, sin prisa, el escritor y periodista dijo que
llevaría a Varsovia, donde radica, las preguntas de los estudiantes
para elaborar un documento sobre su curiosidad, inteligencia y sabiduría.
Luego firmó decenas y decenas de libros con dedicatorias que alternó
con sonrisas para los jóvenes.
Frente a la globalización, la cultura ocupará
más espacios
Pobreza e indígenas, temas soslayados ante el
escritor
La labor periodística, indispensable en la sociedad
ANASELLA ACOSTA NIETO
Guerra, corrupción, pobreza, educación,
indígenas, todos estos problemas que aquejan a México y al
mundo, fueron soslayados en las numerosas preguntas que los estudiantes
de la Universidad Iberoamericana y algunos curiosos plantearon al periodista
y escritor Ryszard Kapuscinski durante la presentación de su más
reciente libro, Los cínicos no sirven para este oficio.
Dentro de un recinto insuficiente para estudiantes y seguidores
del autor de El emperador, como resultó ser el auditorio
Crescencio Ballesteros Ibarra de esa universidad en Lomas de Santa Fe,
los alumnos atinaron a preguntar sobre el papel de la Internet como instrumento
que suprime el periodismo de investigación y sobre el papel de la
cultura dentro del ejercicio periodístico.
Sin embargo, la mayoría de las preguntas -respondidas
con paciencia por Kapuscinski- fue acerca de ''¿qué pensaba
hace 10 minutos?", de si ''¿los jóvenes deben superar a los
viejos?" o ''¿cómo debemos acercarnos a los personajes como
lo hacen los reporteros?"
La mañana del jueves el acceso a la Iberoamericana
estuvo más saturado que de costumbre por los actos y conferencias
que coincidieron con la visita del periodista polaco. Pero a las 11:15
horas el auditorio ubicado en el edificio F se hallaba ocupado a su máxima
capacidad. Cerca de 300 personas sentadas en sillas y en la duela, o de
pie, escuchaban el inicio de la presentación.
Búsqueda de un rostro propio
Kapuscinski reiteró sus posturas respecto al oficio
periodístico y advirtió a los estudiantes que éste
no es para quien espere ganar mucho dinero, pero sí es una labor
indispensable para el funcionamiento de toda sociedad moderna.
Ante un mundo que cambia y genera ideas con rapidez, mencionó,
es preciso que los periodistas estudien a diario y se cultiven, pues a
las personas les interesa leer a periodistas que les aporten algo.
En respuesta a la pregunta de una estudiante española
sobre la cultura y el periodismo, el autor de Ebano, expresó:
''Frente a la globalización, la cultura va a ocupar cada vez más
espacios, porque contrario a este fenómeno, las personas desean
conservar sus propias identidades, historias, tradiciones y creencias.
''El hombre no quiere desaparecer ni físicamente
ni como metáfora; desea tener su propio rostro y su nombre, existir
como individuos, con sus símbolos de identidad.
''Más importante que un mundo mcdonalizado -como
se dice ahora- es su propia identidad y es por medio de la cultura que
ésta se manifiesta."