Operativo en el mercado Sonora en busca de ejemplares

Realiza la Profepa un diagnóstico nacional sobre tráfico ilegal de aves

CAROLINA GOMEZ MENA

En México está presente alrededor de 60 por ciento de las especies del planeta, y en cuanto a variedad de aves ocupa el undécimo lugar mundial, pero son justamente éstas las más amenazas por el tráfico ilegal en el país. Es por ello que la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) realiza un diagnóstico a escala nacional para identificar las áreas "críticas de captura, acopio, distribución y comercio", el cual estará concluido en noviembre, informó José Bernal Stoopen, director general de Inspección y Vigilancia de la Vida Silvestre de la Profepa.

Entrevistado durante la realización de un operativo sorpresa en el mercado Sonora, en donde se estima se negocia casi 35 por ciento de los animales silvestres capturados en el país, Bernal Stoopen agregó que el estudio deberá apoyarse posteriormente con el "fortalecimiento de nuestro equipo de inspectores". La intención es que una vez que se hayan obtenido los resultados del mapeo la plantilla de inspectores de vida silvestre se duplique, es decir, sea "por lo menos de 240".

No obstante, para la Profepa es más efectivo que mediante la prevención se logre un "cambio de actitudes" entre los particulares, que "entiendan que los animales silvestres no son mascotas; podemos tener cinco veces más inspectores, pero mientras no concienticemos no lograremos mucho más", advirtió.

En este tenor, expuso que los compradores de las especies silvestres, en especial de aves canoras y de ornato, tales como cenzontles, jilgueros, cotorras, pericos y loros, deben saber que "por cada ave que llega a un particular de forma ilegal, mueren entre 10 y 15 ejemplares", es decir que, en el trayecto, desde la captura y el paso por los intermediarios hasta el comprador final, de entre 11 a 16 aves traficadas sólo logra sobrevivir una.

Agregó que de forma paralela al diagnóstico se efectúan operativos en diversos estados; como en Jalisco, donde se aseguró precautoriamente 280 ejemplares; en Puebla se decomisaron 300 aves canoras y de ornato; también en San Luis Potosí, Yucatán, Veracruz, Chiapas y Guerrero.

Al destacar que se pretende que de aquí a fin de año su dirección haya realizado unos 14 operativos especiales, sostuvo que se está dirigiendo "60 por ciento de las inspecciones a 19 áreas críticas en materia de vida silvestre", y adelantó que en "dos años la expectativa es que el nivel de cumplimiento de las inspecciones sea de 70 por ciento", es decir, que del total de visitas, en 70 por ciento se encuentre cumplimiento de la ley.

Las penas de cárcel para quien compre, posea o transporte especies protegidas son de hasta 15 años, si el infractor es un funcionario; de 12 años, si se afecta a un área natural protegida, y de nueve años la mínima.

A razón de esto hizo hincapié en que para no infringir la ley, al momento de la adquisición del ejemplar se debe "pedir la factura, el permiso de autorización de la Dirección General de Vida Silvestre, y si es extranjera, el certificado CITES, y también se debe verificar el marcaje individual, que en el caso de las aves son anillos, y en los mamíferos, grapas o microchips".

Durante el operativo se comprobó un "incremento en el cumplimiento de la normatividad", pues sólo se decomisaron 39 ejemplares de 13 especies diferentes". No obstante, se sabe que ahora se utiliza la "venta por catálogo, y que esa actividad se da en el exterior del mercado. Los animales están confinados en bodegas diferentes a los puestos establecidos, pudiendo estar en domicilios aledaños al mercado o en vehículos particulares".