Actuar rápido "para crear confianza", pide el Wall Street Journal al petista
Se reúne Lula con líderes aliados para avanzar en la composición de su gobierno
REUTERS Y AFP
Brasilia, 1Ɔ de noviembre. El presidente electo de Brasil, Luiz Inacio Lula da Silva, se reunió este viernes con dirigentes políticos aliados para avanzar en la composición de su futuro gobierno, el primero de izquierda en la historia del país, que deberá administrar una aguda escasez de fondos.
Al tiempo, el diario estadunidense The Wall Street Journal señaló en su edición de hoy que el líder del Partido de los Trabajadores (PT) debe actuar rápido "para crear confianza" o se acabará la luna de miel con el sector financiero.
Lula, quien ganó la presidencia el domingo pasado con una arrolladora ventaja en las urnas, recibió a representantes de 11 fuerzas políticas que lo apoyaron en la disputa electoral, para discutir su participación en el futuro gobierno.
Tras la reunión, el portavoz del dirigente petista, André Singer, indicó que los aliados del PT "tendrán participación en la composición del nuevo gobierno, pero no necesariamente cargos".
Uno de los asistentes al encuentro, el di-putado José Carlos Martínez, del centrista Partido Trabalhista Brasileño, reveló que Lula mantendrá la próxima semana en Brasilia diálogos con fuerzas políticas que se-rán opositoras a su gobierno.
"Antes de asumir la presidencia Lula tendrá que conseguir el apoyo de otros partidos que no participaron en esa alianza, porque los que lo apoyaron no son suficientes para aprobar proyectos en la Cámara de Diputados y el Senado", afirmó el politólogo de la Escuela de Sociología y Política de Sao Paulo, Rogirio Smith.
El analista consideró que el presidente electo y los líderes del PT que negocian esas alianzas "son competentes para conseguir una coalición mayoritaria", aunque estimó que será menor que la del presidente saliente, Fernando Henrique Cardoso.
El mandatario electo anunció que, tras recibir el mando el primero de enero próximo, pretende gobernar en forma amplia con todos los sectores de la sociedad y no sólo con su agrupación política.
También se comprometió a honrar todos los compromisos del Estado, incluyendo la pesada deuda pública de 260 mil millones de dólares y un acuerdo con el Fondo Mo-netario Internacional (FMI).
El PT afrontará su primer año de gobierno, en el que pretende aplicar su prioritario programa para combatir el hambre, en un contexto de gran escasez de recursos.
El presupuesto para 2003, aún en discusión en el Congreso, tendría una reducción de unos 4 mil 155 millones de dólares disponibles con respecto a este año por caídas en la recaudación de impuestos.
Además, según publicó este día el diario Folha de Sao Paulo, el FMI querría que Brasil eleve su meta de superávit presupuestario para 2003.
Por su parte, el Wall Street Journal quiere señales más claras de que el líder sindicalista continuará la reforma fiscal y de seguridad social, medidas necesarias para poner en orden la casa en materia fiscal.
De lo contrario, alertó, la mayor economía de América Latina podría enfrentar una crisis de deuda que seguramente estremecería a la región, ya sumida en problemas.
"O el país entra en un círculo virtuoso de tasas de interés más bajas, una moneda es-table y progreso legislativo hacia reformas, o los escépticos dominan y las tasas de intereses siguen altas", señaló el rotativo.