Se retocarán pinturas para recordar la
matanza de Acteal y la irrupción del EZLN
Recrean la lucha indígena de Chiapas en unos
40 murales
Algunas obras no han sido respetadas por la policía
ni por vecinos de las comunidades
Con los temas del movimiento zapatista se cubren las
láminas donadas por la Coca-Cola
MONICA MATEOS-VEGA
Las fachadas de las casas de las zonas marginadas de los
Altos de Chiapas no son grises. Aunque humildes y un tanto desvencijadas
están cubiertas por murales multicolores que hablan de la historia
reciente de sus habitantes, de sus luchas y esperanzas.
Son cerca de 40 murales los que ha realizado el Laboratorio
de Integración Plástica La Gárgola en diversas comunidades
indígenas chiapanecas desde que se inició el levantamiento
zapatista en enero de 1994.
Y aunque no todas las obras han sido respetadas por la
policía o por vecinos que se oponen al Ejército Zapatista
de Liberación Nacional, los murales que existen y los que les falta
por realizar son pretexto para que el laboratorio organice de manera continua
brigadas culturales y talleres de creatividad.
El paliacate, símbolo de rebeldía
A
partir del 15 de diciembre y hasta fin de año, los integrantes de
La Gárgola estarán en Polho y Acteal para retocar las pinturas
y dejarlas en todo su esplendor para que presidan los aniversarios de la
matanza del 22 de diciembre de 1997 y del inicio del movimiento armado.
También pintarán un par de murales sobre
láminas (de tres por 1.40 metros) que la refresquera Coca-Cola donó
a las comunidades, ''con temas de la lucha zapatista, pero también
acerca de la alimentación, un rubro que nos interesa promover",
explicó en entrevista Gustavo Chávez Pavón, pintor
autodidacta, promotor cultural, diseñador de carteles, fundador
y miembro de La Gárgola.
Explicó que el material que utilizaron en junio
pasado fue donado por el Fideicomiso para la Salud de los Niños
Indígenas de México, que coordina Ofelia Medina, y por el
grupo cultural Tinku, de Dinamarca, dirigido por Doris Palvio.
En esa ocasión, la comunidad de Acteal les pidió
decorar su iglesia y realizar un estandarte de la Virgen de Guadalupe.
Chávez Pavón aceptó realizar la imagen,
pero acordó con los habitantes que la virgen debería tener
un vínculo con ellos, por eso propuso que tuviera un paliacate,
símbolo rebelde.
La Gárgola es una agrupación autogestiva
que debido a la difusión de su trabajo en el extranjero, ahora tiene
como principal fuente de ingresos el pago que recibe por realizar murales
en países europeos, como Dinamarca y Suecia, donde han pintado en
escuelas, centros culturales y sedes de organizaciones sociales.
En estos lugares ya son casi 20 las obras que Chávez
Pavón ha plasmado, con las cuales ha cumplido uno de los objetivos
más importantes de La Gárgola: establecer un intercambio
cultural dinámico y público mediante la práctica colectiva
del muralismo. El año que viene tienen ya compromisos para realizar
diversas obras plásticas en California, Estados Unidos; Groenlandia
y España.
''El muralismo no es un arte determinado por la moda,
posee un lenguaje humano, con una relación muy importante con los
actos sociales", añadió el promotor.
Talleres para niños
Los
talleres de creatividad con los niños indígenas es una de
las labores que más satisfacciones ha dado a La Gárgola,
grupo en el que colaboran Pepe Talas, Elvira Guzmán y Diana Tellervo.
''En cuanto reciben sus pinceles y sus botes de pintura,
los pequeños se lanzan como avispas sobre las paredes, trabaje y
trabaje, absortos en la creación de escenas que plasman lo que les
ha ocurrido y lo que esperan del futuro", señaló Gustavo
Chávez.
Las tablas viejas se llenan de imágenes de ángeles
encapuchados, de rostros con lágrimas negras que se transforman
en los bigotes de Zapata, de modernos códices que narran la opresión
del hermano por el hermano.
En Acteal y Polho cualquiera puede tomar un pincel y unirse
a la pinta de casas y escuelas, como lo han hecho las brigadas de la Cruz
Roja y visitantes extranjeros.
El material se queda con los maestros de las comunidades
para que continúen la labor de impartir los talleres de creatividad.
Porque el muralismo que se enseña en la selva no es sólo
un instrumento al servicio de la sociedad y la política.
''Los muros también permiten explayar el interior
del ser. El arte es un medio de comunicación de la gente con el
tiempo", puntualizó Chávez Pavón.
Para mayor información sobre las actividades de
La Gárgola, o para colaborar con el Laboratorio de Integración
Plástica, se puede escribir al siguiente correo electrónico:
[email protected].