El instituto considera que hay indicios de desvío
de fondos públicos en 2000
El IFE emplazará al PRI a presentar pruebas
de defensa sobre el Pemexgate
La CNBV niega información de cuentas que habrían
sido usadas para triangular fondos
ALONSO URRUTIA
Por considerar que entre los documentos y actuaciones
que ya tiene en su poder existen indicios de un presunto desvío
de recursos de empresas públicas para el financiamiento de la campaña
presidencial del Partido Revolucionario Institucional (PRI) en 2000, la
Comisión de Fiscalización del Instituto Federal Electoral
(IFE) determinó emplazar al tricolor para que "aporte lo
que a su derecho convenga" y se inicie la segunda etapa del proceso de
investigación del denominado Pemexgate.
Sin embargo, no se ha hablado de castigos, pues "en el
momento procesal en el que nos encontramos es inadecuado señalar
algún monto de sanción, entre otros aspectos porque aún
no se tienen las argumentaciones de la propia defensa", expresó
el presidente de la Comisión de Fiscalización, Alonso Lujambio.
A
su vez, Jaime Cárdenas señaló: "en ningún momento
se ha discutido una eventual sanción porque sería prejuzgar
o bien tanto como condenar a un acusado cuando apenas vamos en la demanda".
Agregó que a partir de la fecha en que se le notifique
oficialmente al PRI del emplazamiento corren cinco días para su
respuesta, aunque el plazo se pudiera duplicar en razón de que son
40 mil fojas lo que corresponde a las actuaciones del Pemexgate.
"Calculo, con pocas bases, pues eso dependerá de
las pruebas que presente el PRI en su defensa, que el IFE podría
estar deliberando al respecto alrededor de febrero o marzo."
También Jaime Cárdenas subrayó que
hasta ahora no se ha discutido en la comisión el tema de las sanciones
al partido.
Lujambio explicó que para llegar a la determinación
de emplazar al PRI se valoraron los elementos enviados por la Fiscalía
Especializada para Delitos Electorales de la Procuraduría General
de la República contenidos en la averiguación previa que
se sigue paralelamente por la posible comisión de delitos penales.
Se preguntó a Lujambio su posición en torno
a las acusaciones que hiciera el tricolor acerca de la existencia
de parcialidad en las investigaciones de los casos de Pemex y de Amigos
de Fox. Respondió que la Comisión de Fiscalización
ha actuado escrupulosamente de acuerdo con los principios democráticos
del IFE.
-¿El emplazamiento implica ya una responsabilidad
del PRI?
-Aún no sabemos si hay responsabilidad o no. Lo
que determinamos es que hay indicios, los cuales están contenidos
en esas actuaciones -contestó Cárdenas.
Explicó que según lo que se ha indagado
hasta ahora, esos indicios corresponden al posible desvío de recursos
públicos en favor de la campaña de Francisco Labastida; la
supuesta violación de los topes a las aportaciones individuales
y la posible violación a los topes de campaña establecidos.
Cárdenas reconoció que como parte de lo
accidentada que ha sido la investigación del Pemexgate -la
imposibilidad de que el IFE accediera a cierta información bancaria,
los propios plazos del Ministerio Público, entre otros- la resolución
sin duda podría afectar la equidad de la contienda electoral del
próximo año, pero por razones ajenas al IFE.
Durante la reunión, que se prolongó tres
horas y media -tres de las cuales se consumieron por el debate en torno
al esquema que debería utilizarse para el emplazamiento-, se informó
también de la más reciente negativa de la Comisión
Nacional Bancaria y de Valores respecto de algunas cuentas que presumiblemente
habrían sido utilizadas para la triangulación de recursos
a favor del Revolucionario Institucional.
La decisión finalmente fue votada cuatro a uno,
por las reservas del consejero José Barragán, quien junto
con Cárdenas planteó modificaciones al texto original.
Según
la petición de Cárdenas, el documento que se enviará
al tricolor debería contener la enumeración de los
artículos de la ley electoral que presumiblemente habrían
sido violados por ese partido.
Este punto finalmente fue aprobado, no sin una larga discusión
sobre si su incorporación no implicaría asumir ya una postura
sobre la posible culpabilidad del PRI.
En otro orden de ideas, la comisión también
discutió el informe que será presentado al Consejo General
del IFE relativo a la queja presentada por el Partido de la Revolución
Democrática en contra de las tarifas preferenciales que las televisoras
otorgaron al tricolor en la campaña de 2000.
Tras la revisión de las condiciones en que contrató
cada partido, el IFE "no cuenta con elementos fundados y ciertos de que
haya un trato desigual a los partidos y coaliciones, ni de lo contrario".
El instituto precisa que en el catálogo de medios
electrónicos que se presentó a los partidos se reportó
el tope máximo de los costos de los anuncios, pero no tiene reportes
de las operaciones comerciales que realiza cada partido.
Al responder a las acciones que establecerá para
que en el proceso próximo no haya trato desigual, el IFE señala
que se promovió una reforma al Cofipe para establecer que las variaciones
en los costos no pudieran exceder, en su caso, del 10 por ciento, misma
que no fue aprobada por el Poder Legislativo, por lo que se explorarán
otras vías para evitar, en lo posible, las desigualdades.