Protestan por consulta llevada a cabo para demoler un mercado antiguo

Evitó Protección Civil que comerciantes entraran al palacio de gobierno de Mérida

Consideran que la alcaldesa panista "se promueve políticamente con esa medida"

LUIS A. BOFFIL GOMEZ CORRESPONSAL

Merida, Yuc., 8 de diciembre. Efectivos de la Secretaría de Protección y Vialidad evitaron que entraran por la fuerza al palacio municipal capitalino al menos 100 comerciantes inconformes con la consulta ciudadana que realizó este día el cabildo de Mérida para decidir, por medio del voto directo y secreto, si demuele el mercado Lucas de Gálvez y construye otro nuevo, que costaría 150 millones de pesos.

El cuerpo antimotines propinó golpes leves y empujones a varios comerciantes de filiación priísta.

Los manifestantes exigieron que la alcaldesa Ana Rosa Payán Cervera saliera para atenderlos; sin embargo, la ex senadora del PAN evitó la confrontación.

Después del conato de bronca, los locatarios aseguraron antes de retirarse que la consulta ciudadana resultaría un fraude, pues los resultados supuestamente favorecen las pretensiones de Payán Cervera, quien, dijeron, con la demolición del antiguo mercado -considerado el principal centro abastecedor de la entidad- promoverá una campaña proselitista con la cual pretende "continuar vigente" para ocupar futuros cargos de elección popular.

"No toleraré rebeliones" de judiciales: Patrón Laviada

En otro contexto, el gobernador Patricio Patrón Laviada aseguró que su administración no permitirá "rebeliones" en la Policía Judicial del Estado (PJE), en la que 50 agentes amenazaron con paralizar actividades por el despido de dos comandantes, quienes fueron acusados de presuntos actos de corrupción.

Hace dos días, la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) informó del cese de los agentes Angel Ignacio Cocom Pat y Alvaro Gil Ramírez, involucrados en supuestas actividades de extorsión, lo que motivó este día el malestar de sus subordinados. La PJE exhortó a los inconformes a no abandonar sus puestos.

De acuerdo con versiones no confirmadas, los judiciales "rebeldes" se reunieron en la ex estación de ferrocarriles abandonada al oriente de esta ciudad, para tomar un acuerdo al respecto.

Al cierre de esta edición la PGJE no había confirmado si los agentes abandonaron o continuaron su labor.

Patrón Laviada afirmó en conferencia de prensa que su administración no avalará actitudes de presión que pongan en peligro la seguridad de los yucatecos.

Añadió que los policías judiciales corruptos "no tendrán cabida" en la PJE.