Riesgo de que la banca extranjera sólo apoye a consorcios, prevé el Nobel de Economía

Crédito a las empresas o no habrá crecimiento, advierte Joseph Stiglitz

Que las instituciones financieras reactiven la actividad económica mediante réditos bajos, piden pequeños y medianos industriales Por escasez de financiamiento cerraron 50 mil firmas, dicen

ISRAEL RODRIGUEZ

El premio Nobel de Economía 2001, Joseph Stiglitz, sugirió establecer en México una adecuada política de crédito a las empresas, como parte fundamental de la estrategia de crecimiento, y advirtió sobre el riesgo de que la banca extranjera, de acuerdo con experiencias internacionales, escoja hacer negocios sólo con las compañías más grandes y solventes.

En una reunión con el presidente del consejo de administración de Grupo Financiero Banorte, Roberto González Barrera, Stiglitz afirmó que los bancos extranjeros han descuidado a las pequeñas y medianas empresas, arteria vital de crecimiento en el país.

En materia de pensiones, recordó que en Estados Unidos las empresas privadas han incurrido en un déficit de más de 3 billones de dólares, lo cual minará su rentabilidad, y sugirió establecer en México medidas precautorias para evitar que se repita la experiencia.

El Nobel de Economía dijo que el deterioro estructural del sector real de la economía estadunidense ha minado también la credibilidad de sus principales instituciones, incluyendo la banca.

Joseph Stiglitz mantuvo una posición pesimista respecto del futuro inmediato de la economía mundial, dado que en Estados Unidos no se da la fuerte recuperación de la demanda interna, mientras que Europa se encuentra en la ruta de estabilización que le impide utilizar medidas de reactivación económica.

Por separado, la Asociación Latinoamericana de Micros, Pequeños y Medianos Empresarios (Alampyme) se pronunció porque la banca comercial se comprometa con México y reactive el crédito a tasas más bajas para apoyar la actividad productiva. "El gobierno rescató los bancos durante la crisis de 1995 con recursos públicos, y ya es momento de que lo retribuyan con financiamientos blandos, pues continúan beneficiándose con los cuantiosos recursos que anualmente les otorga el Instituto de Protección al Ahorro Bancario."

Pedro Salcedo García, presidente de la Alampyme, aseveró que la globalización económica ha lesionado profundamente y llevado a la quiebra a decenas de miles de industriales, comerciantes, agricultores y prestadores de servicios. La apertura indiscriminada, la ausencia de créditos adecuados, la transferencia del capital productivo al financiero son factores que impiden la evolución de las medianas y pequeñas empresas, fuente principal de generación de empleo y componente fundamental del tejido social.

Informó que en 2002 más de 50 mil empresas tuvieron que cerrar por la caída en las utilidades, falta de financiamiento bancario, inflación, prácticas desleales de comercio, facturación por debajo del costo, contrabando y artículos robados.

"Desafortunadamente, seremos testigos de estos funestos hechos cuando el próximo enero se desgraven los productos agrícolas provenientes de Estados Unidos y Canadá y prácticamente se deje en la indefensión a los campesinos mexicanos", añadió.

Demandó que en los próximos acuerdos comerciales se analicen las asimetrías y se tome en consideración a los sectores involucrados. Advirtió que si no se toman medidas al respecto podrían suscitarse conflictos sociales.

Dijo que 2002 fue un año difícil para los micro, pequeños y medianos empresarios, resultado de un mercado interno empobrecido por el bajo poder adquisitivo de la población.

La Alampyme estimó que el crecimiento del producto interno bruto seguramente será menor a la cifra oficial esperada de 1.8 por ciento y no se reflejará en los ingresos de las micro y pequeñas empresas.

Salcedo García pronosticó que el panorama para el próximo año, a unos días de su inicio, es francamente desalentador. Explicó que el reciente aumento del corto -a 475 millones de pesos diarios- inhibirá el consumo decembrino, además de que el uno por ciento adicional de impuesto sustitutivo del crédito al salario, que totalizará 4 por ciento, encarecerá el empleo y los costos de los productos.

Sostuvo que en 2003 sólo se podrán generar 300 mil plazas, por lo que se presentará otro déficit de un millón 200 mil puestos laborales. Más adelante confió en que el secretario de Hacienda cumpla su promesa en el sentido de que los incrementos de las tarifas que administra el gobierno sean de 2.7 por ciento.

Destacó "la promesa del Ejecutivo de cambiar el derrotero económico para ahora sí impulsar el crecimiento del mercado interno y fomentar el desarrollo de las micro, pequeña y mediana empresas es un aliciente, sobre todo que se reflejará en más de 53 millones de mexicanos pobres. Esperamos que esta promesa sí sea cumplida".