La medida, para relanzar la producción de electricidad

Inicia Norcorea remoción de sistemas de vigilancia de reactor nuclear

AFP, REUTERS Y DPA

Seul, 22 de diciembre. Corea del Norte comenzó hoy a desmontar los sistemas de vigilancia instalados por las Naciones Unidas en su central nuclear desactivada de Yongbyon, para reanudar la generación de electricidad tras la negativa estadunidense de permitir el ingreso de petróleo al país.

Pyongyang ha comenzado "las tareas de remoción de los sellos y cámaras de monitoreo de las instalaciones nucleares que habían sido congeladas para que puedan operar normalmente en la producción de electricidad", señaló la oficial Agencia Central de Noticias Coreana.

Añadió que esta fue "una decisión obligada, ya que nos quedamos sin alternativa a causa de la insistencia de Estados Unidos en que abandonemos nuestro programa nuclear y en aumentar la presión sobre nosotros".

La planta de Yongbyon había estado cerrada conforme a un acuerdo suscrito en 1994 con Estados Unidos, en cumplimiento del cual Corea del Norte congeló sus reactores nucleares a cambio de envíos de petróleo y la construcción, por un consorcio occidental, de dos reactores que podrían servir a fines militares.

Washington suspendió el mes pasado la entrega de carburantes como medida de presión tras afirmar en octubre que Pyongyang había reconocido la existencia de otro programa nuclear militar secreto, basado en uranio enriquecido.

Pyongyang, por su lado, desmintió haber reconocido la existencia de ese programa, al señalar que sólo declaró que el país tenía el derecho de dotarse de armas.

La semana anterior el director del Departamento General de Energía Atómica norcoreano, Ri Je Son, anunció que su país se preparaba para una acción drástica luego de que la Agencia Internacional de Energía Atómica (AIEA), de Naciones Unidas, ignoró la demanda de Pyongyang de retirar el sistema de vigilancia.

En respuesta, el secretario general de la ONU, Kofi Annan, instó a Corea del Norte a respetar las medidas de seguridad impuestas a su programa nuclear y manifestó su deseo de que Pyongyang no expulse a los inspectores de la AIEA.

Corea del Norte ha acusado a Estados Unidos y a Japón de tratar de aislarla. "La forma invariable de actuar de la República de Corea del Norte ante la política de línea dura de los imperialistas estadunidenses es con la posición más enérgica", sostuvo la Agencia Central de Noticias Coreana.

Las reacciones a las medidas de Corea del Norte surgieron de inmediato, y Estados Unidos las condenó. "Esta decisión provoca nuevas inquietudes" sobre la política de ese país, declaró este domingo el portavoz el Departamento de Estado, Louis Fintor, quien llamó a remplazar o reparar las cámaras de vigilancia del reactor de Yongbyon.

El vocero estimó que las explicaciones dadas por Corea del Norte no pueden justificarse por la necesidad de relanzar la producción de electricidad. Asimismo puntualizó que Estados Unidos no va a entrar a un diálogo en respuesta a amenazas o compromisos incumplidos.

Para el senador demócrata Joseph Biden, Corea del Norte representa actualmente un peligro mayor que Irak, al señalar que en cinco meses podría disponer de un arma nuclear.

De su lado, Japón manifestó su preocupación por la decisión de Corea del Norte. "Es lamentable y estamos preocupados", indicó la ministra de Relaciones Exteriores, Yoriko Kawaguchi, quien agregó que su ministerio solicitará a Pyongyang que reinicie el diálogo con la AIEA.

También Francia y Corea del Sur lamentaron la decisión norcoreana.