En 1995-1999, importación de maíz y frijol arriba de las cuotas del TLCAN: diputados

Denuncian dumping de gobierno y trasnacionales contra campesinos

Según estudio de la Cámara, firmas foráneas presionaron para traer productos libres de arancel

ROBERTO GARDUÑO

Entre 1995 y 1999, el gobierno mexicano incurrió en prácticas de dumping contra los productores nacionales de maíz al permitir la importación de 7 millones 162 mil 878 toneladas de grano por arriba de la cuota previamente establecida en el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), por las cuales pagó mil 367 millones de dólares.

La Comisión de Agricultura de la Cámara de Diputados elaboró un análisis sobre el manejo de los cupos de importación para el sector agrario en el marco del TLCAN, y encontró que el dumping realizado por el gobierno federal también se acompañó de prácticas desleales de las firmas importadoras de maíz Anderson Clayton, Cargill, Pilgrims Pride, Continental, Elgo, Maseca Bachoco y Purina, "las cuales presionaron por la ampliación de los cupos de compras al exterior sin arancel".

En un documento elaborado en la Cámara respecto al impacto del TLCAN en el campo mexicano, resalta que la relativa protección a la producción de maíz bajo el sistema de arancel-cuota, por ser una mercancía altamente sensible, fue eliminada por convenir a los intereses de los importadores, muchos de ellos trasnacionales, mientras que los campesinos del país tenían sus cosechas sin vender.

Las consecuencias de la ampliación de los cupos de importación han sido, entre otras, pérdidas millonarias, descapitalización de los productores y "presión social preocupante".

En el caso del frijol, para Estados Unidos y Canadá se estableció una cuota libre de 50 mil toneladas, que se incrementaría en 3 por ciento anual; sin embargo, durante 1996, 1997 y 1998 la Secretaría de Comercio y Fomento Industrial autorizó compras en el extranjero de 238 mil 946 toneladas sin pago del arancel cuota negociado, cuyo valor no cobrado ascendió a 95 millones de dólares.

"El significado de esas operaciones es el de dumping del gobierno federal y de los importadores contra los productores mexicanos de frijol, principalmente de Zacatecas, Chihuahua, Sinaloa y Nayarit, donde dichas compras desquiciaron el mercado y los precios internos."

La Comisión de Agricultura también destaca que a la fecha se han violado medidas fitosanitarias, lo que ha provocado la caída de los precios de venta de los productores cafetaleros.

En otro caso relevante, la importación desleal de productos bovinos provenientes de Estados Unidos ocasionó que el sector nacional perdiera 440 mil empleos entre 1995 y 1998, además de reducir a la mitad la producción de ganado en el último año.

En el mismo periodo, la entrada de bienes a bajo precio provocó una contracción en la oferta de las mercancías nacionales superior a 21 por ciento. "En esos años, la reducción del inventario bovino fue de 30 por ciento. Incluso, en 1998 el valor de la producción en el sector fue de 3.1 millones de dólares, 1.5 millones menos al potencial esperado por la Secretaría de Agricultura."

La caída en los márgenes de operación respecto a las ventas fue de 16 por ciento en 1995, y 8 por ciento en 1997. El precio de las importaciones de carne deshuesada bajó aceleradamente, mientras que su volumen creció frenéticamente, toda vez que en 1995 el precio por kilogramo alcanzó 18 pesos, en 1997 cayó a alrededor de 12, en tanto que el volumen importado pasó de 30 mil toneladas en el primer año a 120 mil para el segundo.

Cuotas compensatorias

"Ante la compleja problemática que atraviesa el sector ganadero del país en todas sus ramas, es necesario que la Secretaría de Economía fije cuotas compensatorias a las importaciones de carne de bovino, sus diferentes cortes y otros derivados, vigilando el impacto que su aplicación pueda tener sobre el abasto suficiente y competitivo para los consumidores del país."

Según el estudio legislativo, una decisión de esa naturaleza provocaría un ambiente de competencia más equitativo y favorecería la reactivación de la ganadería mexicana, permitiéndole ser más competitiva en precios en el mercado doméstico, así como contar con excedentes para la exportación, generar mayores divisas y empleo y aprovechar las ventajas nacionales, como son el clima, la vocación ganadera y la infraestructura.

Se propone al gobierno federal hacer uso de la salvaguarda, que la Organización Mundial de Comercio (OMC) define como aquellas medidas excepcionales que aplica un país para proteger sus sectores más sensibles a la apertura comercial, y que pudieran ser dañados seriamente por un aumento significativo de las importaciones.