El técnico pide a la prensa "no tocar a los jugadores" y se culpa de la mala racha

Apresuran a Carrillo para que busque el triunfo de Cruz Azul

"Desde el principio me equivoqué y tengo que volver a empezar", reconoce el timonel

Admitió que el riesgo del cese está latente, y desea resultados positivos frente a Atlante

MARLENE SANTOS A.

Ante la crisis y fuerte presión que se vive en Cruz Azul, el técnico Mario Carrillo recurrirá a métodos lapuentistas en un intento desesperado por enderezar el rumbo y sanear el ánimo de sus pupilos, por lo que este martes muy temprano emigrará a la cálida Sumiya, habitual refugio americanista.

El timonel de La Máquina, que aún no conoce la victoria en el torneo casero tras siete fechas disputadas, ayer por la mañana se entrevistó con la directiva cementera, cita en la que recibió un espaldarazo, aunque lo apresuraron para obtener resultados positivos. Al tiempo, Carrillo pidió a la prensa "no tocar a los jugadores" y de nuevo se culpó de la mala racha.

Aunque dejó en claro que no copiará la postura del técnico del Puebla, Víctor Manuel Vucetich, quien dijo que no cobrará hasta que gane. El entrenador cementero enfatizó: "Estoy apenado, el único que ha fallado soy yo; desde el principio me equivoqué y tengo que volver a empezar.

"Cuando ganas eres el mejor, hace cinco meses gané todo, iba para la selección nacional y me dijeron que era mejor que Manuel Lapuente, y ahora soy el peor... No son los mejores momentos de mi vida, pero no sé si haya peores, ahora no me toca, ¡ni modo! Pero no maté a nadie, simplemente voy a mejorar", indicó tras la práctica realizada en La Noria.

No obstante, aseguró que la situación no le quita el sueño, "es un privilegio estar sentado aquí, vestir esta playera. Me tengo mucha confianza, mucha fe. Sé que esto me va a redituar, estoy seguro, voy a entrenar más, voy a buscar mejor calidad de trabajo, algo voy a hacer porque es un reto y una ilusión", añadió.

Tras la charla con su directiva comentó que son gente "con mucha cordura, sensatos, saben perfectamente que el futbol no es justo. Me está tocando perder, lo asumo, por eso mi directiva ya me lo comentó, me apoya pero me apresura, por supuesto".

En cuanto a su plantel señaló: "Les voy a pedir algo: no toquen a los muchachos. Ellos han hecho su máximo esfuerzo, se han portado de maravilla, pero ¡hasta ahorita no los he encontrado yo!, no he encontrado el justo medio. Mañana vamos a platicar, voy a hablar con ellos. Voy a trabajar mucho en lo humano".

Finalmente, admitió que el riesgo de cese está latente porque se trata de un equipo donde siempre existe presión y exigencia, "espero que el sábado (ante Atlante) obtengamos el resultado... espero".

Tomás Campos señaló: "Hay que retomar la confianza que es lo que se ha perdido... Estamos a la defensiva, nos meten un gol y ¡créeme! perdemos la confianza, entonces todo es consecuencia de la desconfianza que uno tiene. Esta ida a Sumiya es para tener más unión, pero también enfocada al trabajo". A su vez, Pablo Galdames indicó: "No hay división en el equipo, estamos con ganas de corregir errores, remontar, levantar la cabeza como hombres y profesionales".