A PLENO ZOCALO
José Agustín Ortiz Pinchetti
Si yo fuera diputado
LAS ELECCIONES DE mitad de término del viejo régimen no provocaban ni curiosidad. Los presidentes llegaban en la plenitud del poder. No había escándalos, a pesar del traspaso escandaloso de fondos a favor del partido oficial. Las listas de diputados se hacían en Gobernación o en Los Pinos. Las candidaturas y las elecciones eran formulismos. Si duda del cambio profundo en la política, compare las aburridas elecciones descritas por Jorge Ibargüengoitia a principios de los 80 y las actuales. Con su cauda de investigaciones, denuncias, escándalos.
HE SIDO UNO entre miles que han luchado porque las cosas sean como empiezan a ser: las elecciones mexicanas tengan un resultado incierto, los partidos y los candidatos estén sujetos a un escrutinio y que el sufragio sea efectivo y la competencia verdadera. En 1997 intenté ser candidato a diputado por el PRD; cierta mano negra se interpuso y preferí continuar en la actividad cívica. En el año 2000 lo intenté otra vez, pero el PRD eliminó a los candidatos externos.
HOY ME ENCAMINO como candidato externo del PRD a una posible diputación federal. Me he preguntado: "Ƒy si fuera diputado?" Como decía Cantinflas, el fundador de la retórica política del siglo pasado.
1. SERIA ABSOLUTAMENTE leal al partido que me invita. Algunos candidatos externos del PRD se volvieron independientes y después empezaron a actuar incluso en contra de las líneas del partido.
2. TRABAJARIA EN los procesos parlamentarios y legislativos para definir los intereses vitales de México. Creo que ya es tiempo de que sustituyamos el viejo nacionalismo por un patriotismo efectivo, enérgico, pragmático, centrado en los intereses del país, pero encuadrado en los grandes principios identificados por la sabia tradición nacional. Para que nos respeten tenemos que respetarnos a nosotros mismos. Quien ha negociado con los estadunidenses y canadienses sabe que ellos desprecian a los abyectos y reconocen a los que los afrontan con dignidad y astucia.
3. ME SUMARIA al impulso del proceso de la distribución de la riqueza. No crecemos porque no tenemos mercado interno; 70 por ciento de los activos bancarios se concentra en 30 mil familias. México no será una nación moderna mientras 65 por ciento de la población viva abajo del nivel de pobreza. El ensayo neoliberal lleva 20 años de aplicación. Sus frutos son obvios: ni desarrollo ni crecimiento. Debemos buscar una política económica que, sin descuidar la estructura financiera, no sacrifique a ella el interés colectivo.
4. PARTICIPARIA EN el logro de acuerdos con todas las fuerzas políticas. Coincidimos en más cosas que en las que discrepamos. La reforma del Estado se frustró porque el presidente Fox no presentó el día de la toma de poseción de su gobierno un proyecto completo, a pesar de que había sido consensado por representantes de todas las tendencias y de todos los partidos.