Combate de negro y de perros se escenifica
en el teatro Santa Catarina
Koltès propone metáforas del ser humano
cuando se le considera una mercancía
La obra refleja el miedo del hombre a enfrentar sus
demonios y el temor a decir la verdad
CARLOS PAUL
El reclamo del cuerpo de un jornalero negro asesinado
en un campamento francés de obras, perdido en algún lugar
del continente africano, desata una serie de confrontaciones entre un trío
de hombres y una mujer y dos mundos opuestos: el de los blancos y el de
los negros.
Esos
enfrentamientos ''representan una metáfora de la vida y la humanidad".
Remiten y reflejan la soledad del ser humano, sus mentiras, sus luchas
contra y por el poder, sus miedos, dudas y mezquindades, así como
los frustrados deseos de acercarse al otro y la necesidad de cariño
e identidad, explican la actriz Norma Angélica y los actores Moisés
Manzano, Carlos Cobos y Gerardo Taracena, quienes integran el reparto de
la puesta en escena de Combate de negro y de perros, escrita por
el dramaturgo francés Bernard-Marie Koltès, dirigida por
David Psalmon.
Imposibilidad de comprensión
La obra -destacan los actores- refleja, mediante una serie
de enfrentamientos emocionales, la dificultad humana de poder cohabitar
en un mismo territorio, así como los obstáculos a los que
se enfrentan las personas para comunicarse. Koltès ''expone con
furia a una sociedad estúpida, un supuesto mecanismo democrático
que no existe y la imposibilidad de comprendernos".
Es un texto, señala Norma Angélica, en el
que el autor muestra cómo el hombre miente por conveniencia o borreguismo.
Es una obra, manifiesta Manzano, que implica ''esos intentos por llenar
el vacío de la soledad, la búsqueda de una identidad, la
afirmación de saber que eres lo que dices ser''.
Es también, explica Cobos, ''el miedo del hombre
para enfrentarse a sus propios demonios. El temor a decir la verdad a tiempo."
En la puesta en escena, añade Taracena, se ve reflejado,
de manera indirecta, los temas del colonialismo y el hombre como mercancía.
''Vemos cómo se presenta el fenómeno de
apropiación de la tierra de un país por otro."
Además, ese asesinato y la estrategia para evitar
la entrega del cuerpo, bien podría ser una analogía de lo
que sucedió en Aguas Blancas, Guerrero, dice Manzano. ''Las autoridades
expresan: bueno, ya los matamos, cuánto dinero te damos. Ayudamos
a la familia y se acabó el problema. Callémonos todos la
boca. Aquí también se expone eso: ¿Cuánto vale
un ser humano?"
Koltès propone, concluye David Psalmon, ''una alegoría
de lo que son los intercambios humanos, que el hombre, al final, es una
mercancía igual que cualquier otra cosa".
Combate de negro y de perros termina su temporada
el 13 de mayo y se escenifica de miércoles a viernes, a las 20 horas;
sábados a las 19, y domingos a las 18 horas, en el teatro Santa
Catarina (Plaza de Santa Catarina 10, esquina Francisco Sosa, Coyoacán).