Javier Zamora Bonilla habla de su biografía
sobre el humanista español
Como filósofo, José Ortega y Gasset ''no
ha entrado del todo a la academia''
En España se niega valor a su pensamiento, deplora
Integró idealismo y realismo
CESAR GÜEMES
No obstante las considerables aportaciones de José
Ortega y Gasset a diversos campos de las ciencias sociales, sus obras sólo
son leídas en el ámbito de habla castellana, expresa su biógrafo,
el ensayista español Javier Zamora Bonilla, quien estuvo en México
para acompañar la aparición de su biografía Ortega
y Gasset.
''En
España apenas comienza a prestársele atención desde
el punto de vista académico. Las universidades e institutos de investigación
empiezan a verlo como el filósofo que fue. Luego, Ortega y Gasset
siempre ha sido un autor leído, a veces más, a veces menos,
pero desde que comenzó a publicar gozó de la bondad del público.
Es el caso, por ejemplo, de La rebelión de las masas, muy
leído en México. Sin embargo, como filósofo no ha
entrado del todo a la academia", explica Zamora.
-¿A qué atribuye esta ausencia?
-En gran parte a que incluso dentro de España no
ha sido considerado filósofo. Se le ha negado valor a su pensamiento.
Además de que se dice en las escuelas que en castellano no se puede
hacer filosofía, ha de ser en alemán o en inglés.
Eso dificulta el conocimiento de Ortega y Gasset, que se va salvando porque
la obsesión por las estructuras cerradas vira hacia una forma de
mirar la realidad con ojos abiertos hacia lo humano. Si esto cambia en
diversos países, es de esperarse que modifique el modo de pensar
del mundo hispano.
Toda vida es una novela
-¿De qué concepción se pierden quienes
no acuden al Ortega y Gasset filósofo?
-Lo principal en él es la idea de que la realidad
radical es la vida de cada uno. El se pregunta: ¿cuál es
la realidad que buscamos? Bueno, se responde, toda filosofía busca
una realidad en qué apoyar las otras realidades. El idealismo había
encontrado la conciencia y el realismo los objetos, así que a Ortega
y Gasset corresponde integrar esas dos vertientes. De modo que para él,
el sitio en el que radican todas las realidades es la vida humana que equivale
al ''yo y mi circunstancia''.
''Esa circunstancia está compuesta de otras personas,
de artificios que ha ido creando el mundo, lo que se llama cultura y elementos
naturales. Entonces, para interpretar esa realidad radical lo primordial
es transformar la razón físico-matemática del siglo
XIX, la razón de la modernidad, que a juicio del filósofo
nos llevó a un positivismo cientificista excesivo, en razón
vital e histórica. Es decir, una comprensión del hombre en
su circunstancia y su devenir: todos en el sentido individual provenimos
de un 'antes', tenemos un prospecto de vida expresado por el concepto de
futuro y estos dos elementos se suman a la concepción social, al
entorno.''
Zamora Bonilla concibió la posibilidad de realizar
esa biografía -publicada por Plaza & Janés-, a partir
del sesgo de sus lecturas: ''Mi principal objetivo, muy al principio, era
hacer una especie de interpretación del pensamiento político
de Ortega y Gasset en la España de la primera mitad del siglo XX
y relacionarlo con otros personajes de esa época, como Miguel de
Unamuno o Fernando de los Ríos. Luego de indagar en esa época
por medio del filósofo advertí que tenía una buena
cantidad de datos biográficos, además de que me interesaba
su pensamiento filosófico como un aporte considerable a la disciplina
originalmente planteado en castellano.''
Es posible pensar que Ortega y Gasset dijo de sí
y de su mundo todo lo que consideró pertinente a lo largo de su
vasta obra, pero Javier Zamora encontró material no sólo
para dejarlo consignado en las 653 páginas de su libro, sino que,
nos dice, dejó mucho fuera ''por lo menos otro tanto, y esto sucede
porque un personaje como él tiene muchos intereses distintos. Basta
hablar, por ejemplo, de su idea de España, sus planteamientos de
nación, la filosofía de orden metafísico y sus preocupaciones
de índole política y cultural. Eso abre un campo muy amplio
de trabajo".
-Si bien esta biografía no es una novela, tiene
rasgos del género.
-Ortega y Gasset lo decía: toda vida es una novela.
Si bien este libro es una biografía en sentido estricto, también
soy consciente de que el personaje que aparece es el que he visto de manera
personal. Su existencia da para muchas vidas y para otras tantas biografías.