La Confraternice busca liberar a los 80 detenidos por la matanza de 1997, aducen

Acteal, 66 meses sin justicia plena, denuncian Las Abejas

ELIO HENRIQUEZ CORRESPONSAL

San Cristobal de Las Casas, Chis., 31 de mayo. La Confraternidad de Iglesias Cristianas y Evangélicas (Confraternice) "busca estrategias para liberar" a los aproximadamente 80 indígenas presos en el penal de Cerro Hueco acusados de haber participado en la matanza de 45 tzotziles en Acteal el 22 de diciembre de 1997, afirmó la organización civil Las Abejas, a la que pertenecían las víctimas.

En carta al presidente Vicente Fox, aseveró que los hechos no tuvieron de fondo la intolerancia religiosa, como dicen ahora pastores protestantes, quienes "usan versiones contradictorias para confundir, y defienden con ceguera a los que han hecho derramar sangre y matado inocentes".

Ahora, agregó la agrupación, los evangélicos "responsabilizan a los zapatistas, a la diócesis de San Cristóbal y al Centro de Derechos Humanos Fray Bartolomé de las Casas de no haber hecho lo suficiente para impedir la matanza, cuando en realidad (éstos) mandaron un aviso al secretario de Gobierno (Homero Tovilla Cristiani), quien no hizo nada para evitar que los paramilitares atacaran a la gente indefensa".

Señaló que el pastor Arturo Farela Gutiérrez, presidente de la Confraternice, "indica que los que asesinaron a los 45 católicos que estaban en la ermita de Acteal fueron la Seguridad Publica estatal o fantasmas". Sin embargo, abundó, "reconoce que personas tomaron las armas a quienes llaman defensores o guardianes de Chenalhó, que el pueblo cooperó para que se adquirieran y fueran a enfrentar a los zapatistas".

Además -expresa Las Abejas- los presbiterianos "indican que un catequista elaboró la lista para detener a las personas, y que el conflicto tenía tintes de intolerancia religiosa, lo cual es totalmente falso".

Farela Gutiérrez dice que de la matanza ninguno fue culpable, ni los que están recluidos en Cerro Hueco, pero inventa que tal vez fueron policías de Seguridad Publica o fantasmas, para encubrir, de manera cínica, los hechos, subrayó Las Abejas.

"Han pasado más de 65 meses de la matanza y los detenidos se dicen inocentes, sus defensores -pastores presbiterianos- buscan argumentos que no están sustentados en la realidad, han utilizado muchas palabras negativas y responsabilizan a otro grupo o institución."

Exigió a las autoridades proceder "contra los autores materiales e intelectuales de la matanza, pues a cinco años y medio de los hechos no se ha hecho justicia plena".