Demanda la devolución de recursos autogenerados

El director del Politécnico arremete contra el burocratismo de Hacienda

KARINA AVILES

A seis meses de iniciado el año, la Secretaría de Hacienda y Crédito Público aún no libera en su totalidad el gasto fiscal 2003 aprobado para el Instituto Politécnico Nacional (IPN), acusó Miguel Angel Correa Jasso, director general del organismo educativo, y afirmó que la "simplificación administrativa" impuesta por el gobierno federal más que ayudar a la casa de estudios le ha complicado su desarrollo y el cumplimiento de tareas sustantivas.

Aseguró que los únicos recursos fiscales otorgados al IPN este año son los correspondientes al rubro 1000, en el que está incluido el pago de las nóminas, pero Hacienda no ha regresado los recursos autogenerados, ni en el monto ni el tiempo acordados, por lo cual le falta por devolver al menos 70 por ciento del dinero que obtiene la institución vía la venta de servicios.

En conferencia de prensa -en la que anunció que a partir del próximo ciclo escolar (el cual comienza en agosto) se implementará el nuevo modelo académico del IPN-, Correa Jasso explicó que para el instituto ha representado una verdadera complicación recibir los recursos que genera.

Ello ha creado "muchos trastornos", incluso, narró, el IPN ha tenido que "contratar a gente ex profeso" para realizar el papeleo para que Hacienda le regrese los fondos autogenerados. Esto "es surrealismo puro, primitivismo sintético a todo lo que da. Es muy molesto dedicar tanto tiempo, dinero y esfuerzo para cumplir con un requisito burocrático al que sigo sin encontrarle el sentido".

Así, "no se nos ha simplificado nada", al contrario, "se nos ha complicado mucho más", sostuvo. Añadió que la falta de independencia financiera frena el quehacer educativo; como ejemplo, reiteró que la institución requiere de por lo menos 5 mil millones de pesos para cubrir necesidades de infraestructura y obras.

Pese a lo anterior, el Politécnico sólo podrá invertir en obras 125 millones de pesos en 2003.

Por otro lado, se refirió al modelo académico que la institución comenzará a operar a partir del próximo ciclo escolar mediante un programa piloto que comprenderá tres escuelas: las superiores de Enfermería y Obstetricia, la de Turismo y la Unidad Profesional Interdisciplinaria de Biotecnología.

Una vez que se hagan los ajustes pertinentes tras conocer los resultados del programa piloto, el nuevo modelo se implementará en todas las escuelas del IPN a partir del ciclo escolar 2004-2005.

Dicho esquema pretende "romper las viejas formas de enseñanza y no regresar más a la metodología" en la que el profesor sólo transmite información y juega un papel unidireccional.

La intención es que el maestro sea un guía que induzca al estudiante a un aprendizaje creativo mediante la búsqueda, por sí mismo, del conocimiento, señaló.

Correa Jasso indicó que el modelo permitirá reducir los índices de deserción provocados en la mayoría de casos por el esquema rígido.

Así, el plan académico tendrá la flexibilidad necesaria para que los alumnos concluyan sus estudios conforme a su propio ritmo. Incluso, explicó, las carreras que ahora se cursan en cuatro o cinco años podrían cursarse en tres, de acuerdo con la capacidad de cada estudiante.

Por último, destacó la necesidad de que las reformas a la Ley Orgánica del IPN sean aprobadas para que el instituto pueda contar con los recursos autogenerados -como lo hacen actualmente las universidades autónomas-, sobre todo en los primeros meses del año, en los cuales no es posible ejercer el presupuesto anual.