México D.F. Viernes 13 de junio de 2003
Nos quedan 90 minutos para demostrar por qué
fuimos los mejores del torneo, indicó
Tengo la ilusión y el equipo para revertir el
marcador: Romano
Reinaldo Navia insistió en que el arbitraje de
Ramos Rizo gravitó en el resultado adverso
No supimos tener calma, pero debemos terminar dignamente
en casa, señaló Carlos Morales
MIGUEL ANGEL RAMIREZ ENVIADO
Monterrey, NL, 12 de junio. "Me voy esperanzado.
Me voy con mucha ilusión, porque creo que tengo el equipo como para
poder revertirlo (el marcador ) y tengo a mi gente a favor ahora. Y tengo
a mi estadio", expresó el técnico argentino Rubén
Omar Romano al abandonar esta ciudad.
Fueron encontrados los sentimientos de Morelia en el regreso
a casa. Mientras Reinaldo Navia insistió en que el árbitro
Felipe Ramos Rizo gravitó en el marcador porque hubo una falta sobre
Darío Franco en el segundo gol, y el penal fue "bastante inventado";
su compañero Carlos Morales apuntó que no deben "echarle
la culpa" al silbante, y recordó uno de los errores que cometieron
en el estadio Tecnológico:
"Después
del primer gol de Monterrey, Navia tiene una jugada frente al portero,
dentro del área, casi en el penal y no puede ser que se la entregue
al guardameta."
Para Morales deben estar concentrados "tanto defensiva
como ofensivamente".
La explicación de la derrota en el partido de ida
de esta final fue que no supieron "hacer las cosas que veníamos
haciendo. No supimos tener calma y ahí esta el resultado".
Agregó que lograron recuperarse del gol tempranero
y manejaron "casi todo el primer tiempo con opciones de gol", pero en el
complemento "fue un desorden el equipo" tras ser sorprendidos pronto con
la segunda anotación. Para su fortuna llegó ese tanto de
Bautista para el 3-1 y les dio respiración.
Ahora únicamente les queda "terminar dignamente"
en su casa, indicó. "Faltan 90 minutos y Monarcas ha demostrado
que en su cancha ha sido muy difícil y contundente. Tenemos que
pensar en esa situación y no desesperarnos".
Sobre los seguidores, Morales señaló que
ignoraban si pesan o no, aunque "tampoco me interesa". Aceptó que
la afición de Monterrey es la mejor de México. Sin embargo,
recordó que la Pandilla "tiene alrededor de 10 años que no
hace nada y Tigres está igual; lo importante son los jugadores y
nada más".
Navia, en cambio, piensa que la gente cumple un papel
importante. Para él Ramos Rizo no iba a cobrar la pena máxima,
"pero cuando sintió los gritos de la gente alzó la mano hacia
el punto penal".
Confía que en el Morelos Monterrey sentirá
la presión de los aficionados, pues no duda que el silbante la tendrá.
"Si nosotros estamos nerviosos imagínate cómo va a estar
el árbitro, se puede echar a toda la gente encima", por eso alentó
la esperanza de "sentir esa ayudadita " del nazareno el sábado,
"como la sintieron ellos (Rayados) también".
A Romano le preocupa el arbitraje, pues aunque Marco Antonio
Rodríguez es "capaz, con personalidad, aunque Ramos Rizo también
lo era e influyó en el marcador" del miércoles.
El estratega dijo que les quedan "90 minutos para demostrar
por qué fuimos los mejores del torneo", y el único problema
que tendría es que "estemos al ciento por ciento".
Mario Ruiz habló del problema que tuvo en el primer
gol. Consideró que fue una falta de comunicación, pues pensó
que su compañero iba a despejar cuando él bajo el balón
en el área. "Igual él pensaba que yo iba a ir por la pelota,
entonces veo la duda y el jugador de Monterrey la aprovechó".
Reconoció su falla, aunque no se sintió
culpable de la derrota de su equipo.
"Me siento mal por el error, pero tuvimos también
oportunidades de gol que quizá hubieran cambiado un poco el ritmo
del encuentro, pero de igual forma no culpo a nadie y asumo mi responsabilidad."
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