RUMBO AL 6 DE JULIO

Apuestan a la experiencia de gobernar para destrabar las reformas que el país necesita

Buscará el PRI ser el eje para culminar la transición: Manlio Fabio Beltrones

"El Pemexgate no es una carga que represente pérdida de votos", asegura Scherman Leaño

ENRIQUE MENDEZ

En la Cámara de Diputados los priístas pretenden ser el factor determinante para articular acuerdos con el Poder Ejecutivo y, como define Manlio Fabio Beltrones Rivera, constituirse en "el eje para culminar el proceso de transición". Llegarán a la 59 Legislatura con una disposición de aprobar iniciativas del presidente Vicente Fox, pero siempre y cuando no insista en la apertura a extranjeros de los sectores estratégicos del país o en aplicar nuevas cargas a los contribuyentes.

Si los convenios que proponga el mandatario "son positivos, para que la ciudadanía se beneficie", el PRI los respaldará, conviene María Esther Scherman Leaño, coordinadora de la campaña El peso de la militancia, proyecto con el que el partido pretende recabar fondos luego de la multa de mil millones de pesos impuesta por el Instituto Federal Electoral (IFE). No obstante, delimita el nivel de diálogo con la administración federal: "Diremos que no a las intenciones retardatarias. Seremos un freno, pero al retroceso".

Angel Buendía Tirado, presidente de la Liga de Economistas Revolucionarios y uno de los principales asesores políticos de Roberto Madrazo Pintado, redondea la expectativa electoral y legislativa del PRI: "El escenario más catastrófico para el partido es que nos quedemos como estamos. Queremos conformar una nueva mayoría, un bloque que permita a la Cámara de Diputados construir espacios de entendimiento para que el país avance".

Los priístas que formarán parte de la próxima bancada en San Lázaro están convencidos de que la oferta de cambio del presidente Fox derivó sólo en el desprestigio del mandatario y la frustración de los ciudadanos, escenario en el que -plantean- el tricolor es la única fuerza política "con experiencia" para consolidar las reformas de "segunda generación" que permitan al país salir del estancamiento.

Una de las cartas más fuertes del priísmo es precisamente la de promoverse como una fuerza "que sí sabe gobernar".

También pretenden dejar atrás la imagen de un partido en permanente conflicto desde que perdieron las elecciones presidenciales de 2000, proceso que también puso fin al "eje articulador" que fue el jefe del Ejecutivo en turno. Afirman que han aprendido de sus errores y no les inquieta el efecto que el escándalo surgido por el financiamiento ilegal a la campaña de Francisco Labastida pueda generar en los electores.

Incluso, Buendía Tirado, en el lugar 11 de la lista de candidatos plurinominales por la tercera circunscripción, señala que ese "error" no puede atribuirse al partido, y delimita que los únicos con acceso a los 500 millones de pesos que el Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana (STPRM) fueron los integrantes de la estructura de campaña de Labastida Ochoa. "Los priístas no tenemos por qué rendir cuentas de ello, pero pagamos los platos rotos con la multa más grande del planeta, que es un perfecto ejemplo de cómo se puede torcer la ley", expone.

En ese ánimo de restarle importancia al caso, Scherman Leaño sostiene que el Pemexgate no es "una carga que represente pasivos o pérdida de votos. Ya superamos etapas más difíciles".

Lecciones de la alternancia

Manlio Fabio Beltrones, ex gobernador de Sonora y quien encabeza la lista de la primera circunscripción, señala que ante el riesgo de reditar "un presidencialismo agotado, de caricatura", es imprescindible destrabar el proceso de transición y culminarlo.

Sólo el PRI, resalta, puede ser el eje para consolidar la transición, porque es la única organización política con la "capacidad y visión" necesarias para hacer eficaces los acuerdos políticos.

Añade: "El PRI sigue siendo la mejor opción de gobierno para México. Un comparativo entre el desempeño de las administraciones priístas y las de otros partidos favorece crecientemente al nuestro.

"En particular, el gobierno de Vicente Fox ha sido decepcionante para la mayoría de los ciudadanos, que se dan cuenta que lo único que ha hecho esta administración es llevar al país al estancamiento económico, a la mayor inseguridad y al permanente conflicto. La lección de la alternancia es que, con todo, el PRI puede dar certeza y rumbo al desarrollo de México."

Sobre la oferta específica del PRI a los electores, comenta que ésta se basa en tres vertientes: una nueva gobernabilidad para el país, que pasa por la reforma de instituciones y prácticas políticas, así como el equilibrio entre poderes; crear las condiciones para recuperar el crecimiento económico; que los priístas están "listos para definir y apoyar los cambios en la legislación hacendaria, laboral y energética", pero con la garantía de que los beneficiarios sean los grupos mayoritarios del país, y fortalecer las políticas y acciones destinadas al combate a la pobreza.

-¿Hasta qué punto afectan las diferencias internas del PRI en su desempeño electoral?

-En el PRI siempre ha habido pluralidad de opiniones y variedad de puntos de vista, propios de cualquier organización democrática. Lo que ha ocurrido es que ahora esa diversidad se expresa más abiertamente, con una dinámica distinta a la que existió hasta 2000, cuando además de la Presidencia el partido perdió el eje político que operaba sus esquemas de equilibrio: el Presidente en turno.

"Para ser objetivos, debe reconocerse que ha habido diferencias, inclusive algunas rupturas entre priístas, como ha pasado en el PAN o en el PRD, pero lo que predominó es el acuerdo y la unidad fundamental, que permitieron superar las circunstancias más difíciles.

"Desde luego, la democracia interna exige un trabajo político más fino y atento de todos, específicamente de Roberto Madrazo y Elba Esther Gordillo."

Las pugnas en la cúpula priísta se recrudecieron en los últimos días de abril y las primeras dos semanas de mayo, y los grupos antagonistas al dirigente Roberto Madrazo lo acusaron de definir en forma autoritaria las listas de candidatos a diputados plurinominales.

La propia secretaria general aprovechó que el gobernador del estado de México, Arturo Montiel Rojas, impugnó el listado, para marcar su distancia frente a Madrazo, y aprovechó también para cuestionarlo, al argumentar que ella también había conocido los nombres de los pluris el mismo día que se discutieron en la Comisión Política Permanente.

No obstante, Angel Buendía considera que "los problemas internos no son un factor que sesgue o frene el voto" hacia el tricolor, y resalta: "Hay un ánimo de darle al PRI una oportunidad, pero debemos ganarla con honestidad, sin repetir errores. Yo lo veo con un optimismo razonable".

Para María Esther Scherman ese episodio no constituyó más que "un momento de curiosidad morbosa", que debe quedar atrás, y admitió la necesidad de que los priístas lo remonten "con propuestas, sin enfrentamientos estériles".

Con Fox, diálogo y acuerdos

En las elecciones de Jalisco, en noviembre de 2000, Scherman Leaño fue coordinadora de la campaña de Jorge Arana. El proceso estatal de ese año fue impugnado por el PRI, pero el tribunal declaró válidas las elecciones en una decisión que, según los priístas, fue influida desde la Secretaría de Gobernación.

Casi tres años después, Scherman señala que la bancada del PRI tendrá "el propósito permanente de disposición al diálogo, la toma de acuerdos y consensos" con la administración foxista, en temas como el energético -donde no se permitirá la privatización o inversiones que dañen a la industria mexicana- y el fiscal, rubro donde una negociación es necesaria, aunque para los priístas ello implique "pagar el costo".

Eso sí, cuestiona que el gobierno foxista se detenga en una estrategia de marketing "para inducir el voto y cubrir" al PAN "con la figura del Presidente de la República".

-¿Pero sí buscarán acuerdos con Fox?

-Sí, si son para que la ciudadanía se beneficie. Pero decimos no a las intenciones retardatarias. Seremos un freno, pero al retroceso.

Angel Buendía cierra: "La gente ya se dio cuenta que la oferta de cambio no llevó a ningún lado y hoy es una pretensión de permanencia de un proyecto que fracasó. Se han agudizado los problemas, y frente a esa frustración, la sabiduría colectiva indica que es mejor votar por un partido político que sí sabe gobernar y ya aprendió de sus errores".