Los tropas estadunidenses confiscaron la piscina olímpica para su divertimento

Nadadores iraquíes deben entrenar en el río Tigris

El entrenamiento no es el adecuado para los atletas que irán a Barcelona, dijo el preparador

AFP

Bagdad, 19 de junio. Los nadadores iraquíes, que se preparan para el campeonato Mundial de Barcelona, en julio próximo, se ven obligados a prepararse en el río Tigris porque las tropas estadunidenses confiscaron la única piscina olímpica de Bagdad para entretenimiento de sus soldados.

El ahora encargado de la alberca de Al-Qadissiya, el sargento Billy Therry, explicó que sólo cumple órdenes. "Todo lo que sé es que el equipo olímpico iraquí tiene derecho a utilizarla de seis a ocho de la mañana y el resto del día es para nosotros".

Por su parte, el entrenador de natación, Faysal Sayed Jafar, dijo que la medida "es injusta porque la mayoría de los 12 integrantes del seleccionado son estudiantes universitarios. Además, para una preparación correcta necesitamos dos sesiones de tres horas, en la mañana y en la tarde".

Tras la guerra, en medio de pillajes y caos, los tritones y el preparador rescataron lo que quedaba de la piscina y realizaron limpieza y reparaciones, pero "luego vinieron los estadunidenses, nos echaron y nos dijeron que nunca más volveríamos", agregó.

Sayed expresó que "el entrenamiento en el río es totalmente diferente al de una alberca. No hay paredes para practicar las vueltas y el agua es muy agitada como para que pueda corregir los movimientos, además de que la presión del agua es muy distinta".

La piscina, situada en el este de Irak, fue construida en 1983 por una compañía surcoreana y es la única que cumple con las normas deportivas internacionales.