México D.F. Martes 24 de junio de 2003
La actriz guardó durante una década
38 piezas en bronce y mármol
Gina Lollobrigida exhibe esculturas en el museo Pushkin
de Moscú
''La segunda vocación de un artista'', tema que
interesa a ese recinto cultural
AFP Y PL
Moscu, 23 de junio. La diva del cine italiano Gina
Lollobrigida, quien al terminar su carrera de actriz, a principios de los
años setenta, se reveló como fotógrafa y ahora se
dedica a las artes plásticas, expone sus esculturas en Moscú,
en una muestra inaugurada este lunes en el Museo de Bellas Artes Alexander
Pushkin, el más importante de la capital rusa.
''No
mostré mis obras a nadie durante los diez años anteriores
para estar segura" de que valía la pena exponerlas, manifestó
Lollobrigida en conferencia de prensa, y agregó que por fin ''ha
realizado su sueño."
Las esculturas ''se me parecen y reflejan como un espejo
mágico mi personalidad, con un carácter y emociones fuertes",
expresó.
Componen la exposición, que concluirá el
10 de agosto, 38 esculturas en bronce y mármol, que representan
en su mayoría los personajes que la actriz encarnó en la
pantalla grande.
Retrospectiva cinematográfica
''Nuestro museo se interesa por el fenómeno de
la segunda vocación", señaló Irina Antonova, directora
del Pushkin, que ha expuesto ya obras del poeta Andrei Voznessenski; del
músico Sviatoslav Richter y del cineasta Serguei Eisenstein.
El lenguaje artístico de Gina Lollobrigida ''no
se inscribe en las tendencias del arte moderno, es más tradicional,
pero hay que estar abierto a todas las formas de expresión artística'',
agregó Richter.
La legendaria actriz llegó a la capital rusa la
semana pasada para asistir al Festival Internacional de Cine de Moscú
(del 20 al 29 de junio), que este año presenta una retrospectiva
de sus películas.
Luego de debutar en el séptimo arte con pequeños
papeles y triunfar en concursos de belleza, Lollobrigida consolidó
su carrera en la actuación con el filme Fanfán la Tulipe,
de Christian Jaque, y Mujeres soñadas, de René Clair,
cintas en las que trabajó con Gerard Philipe. También participó
en largometrajes como Pan, amor y fantasía, de Luigi Comencini;
La infiel, de Stefano; La burla del diablo, de John Huston,
y La romana, de Luigi Zampa.
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