ASTILLERO

Julio Hernández López

Silencios, renuncias y pleitos internos

Enredos y desconcierto por doquier

HAY QUIENES NO atinan a entender lo que este domingo electoral sucedió. El Presidente de la República, al que antes de las elecciones nadie parecía capaz de acallar, ahora guarda enojado silencio ante la ingratitud popular fomentada, según su análisis del momento, por el nuevo villano favorito, el periodismo mexicano, que nunca supo transmitir a la sociedad lo que desde el poder se deseaba y que, en esta hora de duelo presidencial, no alcanza a comprender que Vicente Fox Quesada no era candidato a ningún cargo, y que estaba "gobernando", y por tanto no puede ser culpado de retrocesos o descalabros partidistas.

ENREDOS A VECES tragicómicos en la vida de los siameses que dicen quererse separar, el PAN-gobierno. Los Pinos convocando a corresponsales extranjeros a entrevistar a Santiago Creel como gancho para que finalmente sólo acabaran topándose por puritita coincidencia con Luis Felipe Bravo Mena, que quería echarles rollo a los periodistas foráneos que según eso andarían medio destapados en sus notas y comentarios adversos a un gobierno federal que consideran en picada. šOh, fíjense que iba pasando por aquí y se me ocurrió hacer algunas declaraciones!, pudo haber dicho el dirigente nacional panista a los reporteros de medios internacionales en Los Pinos, que ni lo pelaron y en cambio exigieron la entrevista prometida con el secretario de Gobernación, a cuyas oficinas fueron más tarde citados esos corresponsales con la petición de que no le avisaran a los periodistas nacionales porque hacen preguntas incómodas y latosas. Fox calla, y los panistas que responden nomás no saben qué hacer: ni Creel, que hubo de aceptar que los resultados electorales no son los que Los Pinos esperaba, ni Bravo Mena, que se niega a reconocer el desplome panista, ni Carlos Medina Plascencia, que ya se apuntaba para "suceder a Fox".

EN EL PRD el desconcierto pone cara de triunfalismo. Rosario Robles cree que la mejor forma de zafarse de la trampa declarativa que ella misma se puso meses atrás, al prometer que renunciaría a su cargo si su partido no alcanzaba 20 por ciento de la votación total, es adjudicándose el espejismo del pasado domingo como magno logro ante el cual sus críticos y opositores debieran caer de rodillas para dar gracias. Mucho daño le haría al PRD que su presidenta nacional renunciara por razones de aritmética electoral, pues esa organización se sumiría en una crisis interna de consecuencias graves. Pero, al mismo tiempo, poco bien le hará al PRD una dirigente desgastada a causa del incumplimiento de una baladronada personal e intransferible (que no debe ser endosada para su resolución a ningún consejo nacional, sino cumplida o evadida en los mismos términos individuales en que fue emitida). Frente al reto de los fríos números, Carlos Navarrete escenifica la conocida obra del "No me defiendas, compadre": según el secretario general, Rosario ofreció su renuncia como una mera frase pronunciada "al calor de la campaña", más o menos como los famosos 15 minutos que Fox pedía para arreglar el conflicto zapatista; por ello, y como si ese tipo de declaraciones no produjeran resultados exactamente opuestos, sostuvo que en el PRD "no va a haber ajustes de cuentas, guerras internas ni rodarán cabezas. Hay presidenta para rato y la especulación debe cesar: Rosario es la presidenta del partido y va a encabezar la reforma interna". Todo lo contrario opina la corriente en la que participan Oscar Moreno, Marco Rascón y Salvador Nava Calvillo, pues demandan la renuncia de Robles en congruencia con su palabra pero, además, porque "de 1997 a 2003, la burocracia del PRD perdió 2 millones 100 mil votos". Cuauhtémoc Cárdenas, en declaraciones aparte, manejó las mismas cifras y se dijo preocupado por esa pérdida de votos y porque la cosecha actual se ha concentrado en "seis o siete estados".

EN EL PRI, a pesar de que gozan la tranquilidad de tener un dirigente firme y con proyecto (es decir, Carlos Salinas de Gortari), los pleitos internos son inocultables. Sonora, por ejemplo, no es un platillo que quieran defender Roberto Madrazo o Manlio Fabio Beltrones, pues Eduardo Bours fue cercano colaborador (el del manejo de los dineros) de Francisco Labastida y en su desesperación por ganar puntos en la contienda norteña se desmarcó abiertamente del priísmo tradicional. Sin apoyo del CEN del PRI, negociable, Bours ha sido puesto en la mira de Los Pinos (Ramón Corral fue recaudador importante de fondos para los Amigos de Fox). Y, a propósito, debe mencionarse aquí que este tecleador equivocose al escribir, cuando las cifras eran favorables para el accionista de Bachoco, que su victoria apartaría a Beltrones de la lucha por la coordinación de los diputados federales priístas. Tan no es así que el ex gobernador priísta de Sonora está listo para enfrentarse a la primera profesora del país, con el argumento central de que las relaciones personales de la maestra Gordillo con los alumnos Vicente y Martita ya no es necesaria, sino todo lo contrario, a la luz de la nueva realidad política.

ASTILLAS: LA BANDA DE los Arellano Fé- lix ha sido muy golpeada en lo que va del sexenio (y, como diría algún filósofo de ocasión: otras no, o no tanto), y ahora los gobiernos mexicano y estadunidense se han puesto de acuerdo en ajustar sus fórmulas procesales para que esos narcotraficantes puedan ser extraditados sin obstáculos legales... David Peñaloza, uno de los empresarios favoritos del salinismo, ha sido enviado de España a México para que aquí enfrente acusaciones de fraude por unos 30 millones de dólares. La presencia en México del dueño de Triturados Basálticos hará recordar las muchas maniobras de enriquecimiento a cuenta del erario que se realizaron durante el gobierno de quien ahora maneja delicados hilos de la política nacional... El PRI ganó los tres distritos electorales federales de Ciudad Juárez, lo que no ayuda a las aspiraciones presidenciales de Francisco Barrio Terrazas... En Durango, el tricolor se quedó con las cinco diputaciones federales, así es que Rodolfo Elizondo deberá pensar si prefiere seguir como vocero presidencial o se arriesga a buscar la gubernatura de su estado... šAh: felicitémonos todos, pues ya somos los más pobres de los más ricos!

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