Resultado de la revisión de bienes que reportó el órgano autónomo en 2001

Auditoría financiera al TSJDF detecta anomalías en inventario

Asignó valores unitarios de 111 millones de pesos a ventiladores, archiveros, sillas, escritorios

RAUL LLANOS SAMANIEGO

El Tribunal Superior de Justicia del Distrito Federal (TSJDF) reportó en 2001 inventarios que incluyen escritorios, sillas, archiveros, impresoras y computadoras con valor, cada uno, de 111 millones 111 mil pesos. Por el contrario, informó que poseía 15 mil 681 bienes con valor de un centavo.

De acuerdo con el informe final de resultados de la auditoría aplicada por la Contaduría Mayor de Hacienda de la Asamblea Legislativa a ese órgano autónomo -así como a otro centenar de entidades públicas- se observó que el listado de bienes del TSJDF incluyó 42 bienes cuyo valor "es irreal", pues cita 41 muebles, como los arriba citados, con "costos unitarios de 111,111.1 miles de pesos", y un sillón con valor de 11,111.1 miles de pesos". Según la CMH, el importe de los 42 artículos asciende a 4 mil 566 millones de pesos.

La auditoría financiera fue aplicada específicamente en el rubro de Activos Fijos, y según este órgano impartidor de justicia, cuenta con 97 mil 301 bienes muebles, de los cuales 91 mil 624 registraron "diversas irregularidades que dificulta la identificación y cuantificación", como carecer de factura; valor y fecha de adquisición; número de inventario; con valor de un centavo, valor irreal o bien con alguna otra deficiencia.

Para el órgano fiscalizador de la ALDF el Tribunal de Justicia capitalino no pudo contar ese año con los manuales necesarios para regular el registro y control de los bienes que tiene en sus diferentes áreas de adscripción, como juzgados, salas, oficinas administrativas, centros de Desarrollo Infantil, Servicio Médico Forense, Instituto de Estudios Judiciales y Centro de Convivencia Familiar Supervisada, pero tampoco dispuso de la normatividad específica para la adquisición y arrendamiento de inmuebles.

Mediante un oficio, fechado en marzo de este año, el TSJDF explicó a la Contaduría Mayor de Hacienda que debido a que hay bienes que no tienen soporte documental, como factura, pedido, contrato, etcétera, se les puso el número 1111 y se les asignó un costo de un centavo para que pudieran insertarse en el inventario informático y evitar frenar esa tarea.

Respecto de los bienes con valor irreal, el tribunal precisó a la contaduría que esto se originó por un error que ya fue corregido y aparecen en el sistema de inventario "con valor de un peso".

Por lo que se refiere a los inmuebles, la CMH encontró que hay edificaciones que están todavía a nombre del GDF o de Servimet, a pesar de que son ya propiedad del Tribunal Superior de Justicia; sin embargo, no se ha corregido esa situación.

En la primera parte de la auditoría realizada por la contaduría se detalla que el TSJDF tuvo en 2001 autorización para gastar 62 millones 777 mil pesos para el capítulo de "bienes muebles e inmuebles", pero sólo ejerció un millón 153 mil 100 pesos, es decir, 1.8 por ciento del presupuesto asignado.

De acuerdo con la CMH, la información que presentó el TSJDF en la Cuenta Pública "es incongruente", pues a pesar de que por ley tiene la obligación de impartir justicia, y para ello debe adquirir bienes muebles e inmuebles necesarios para esa tarea, dejó de ejercer 98.2 por ciento de su presupuesto asignado para este fin, es decir, no aplicó 62 millones 777 mil 500 pesos.

El tribunal explicó que esto se debió, entre otras cosas, a que no se designaron magistrados para dos salas; autorizaciones pendientes para la compra de inmuebles y la imposibilidad de consolidar las compras de equipo de cómputo.