México D.F. Jueves 24 de julio de 2003
Cuestionan legisladores las políticas
del organismo
Acuerda la Permanente invitar a "conversar" a representante
del BM
VICTOR BALLINAS Y JOSE GALAN
El Banco Mundial (BM) debe sacar la nariz de los pueblos
a los que ha despojado con su enmascarada misión de salvar a los
desprotegidos y debe reconocer, además, en su crítica a las
privatizaciones, que en realidad busca tirar un salvavidas al sistema que
protege cuando un exclusivo grupo de transnacionales monopoliza los mercados
de energía y agua y pone en jaque mate al resto de las empresas.
La
senadora priísta Laura Alicia Garza Galindo afirmó lo anterior
ayer en la tribuna de la Comisión Permanente del Congreso de la
Unión. Sostuvo que esa es la base de las recomendaciones que en
materia de privatizaciones, particularmente en lo que se refiere a energéticos
y gestión del agua, realizó en días pasados el organismo
financiero internacional.
Propuso como punto de acuerdo, que fue aprobado y turnado
a comisiones, invitar a conversar con los legisladores a la representante
del BM en México, Isabel Guerrero, sobre las medidas recomendadas
en el documento Una agenda de desarrollo integral para la nueva era,
elaborado, "por cierto, durante el periodo de transición entre el
gobierno del PRI y el actual de Acción Nacional".
Luego de recordar la ruta histórica de las privatizaciones
que han ahondado "a mansalva" la brecha entre ricos y pobres; la concentración
de la riqueza en "poquísimas manos"; el desempleo y la inflación,
con el consiguiente deterioro de la economía de miles de millones
de familias en el mundo, y las tensiones sociales que eso conlleva, la
legisladora recordó las quiebras fraudulentas de la empresa estadunidense
Enron; los problemas de la privatización del sistema eléctrico
en Buenos Aires, Argentina, y en Francia.
"¿Qué, acaso se ignora que en Estados Unidos
-siempre nuestro referente- ya se ha suspendido la mayoría de las
desregulaciones en las entidades que conforman la unión, e inclusive
a nivel de condados? Y aún así insistimos. Algo anda mal",
subrayó.
En la mayoría de los mercados "no se puede incorporar
la competencia" porque su naturaleza es de monopolio natural. "Las empresas
públicas son monopolios naturales que deben estar en manos del Estado,
en su carácter de regulador y de prestador de servicios públicos,
como la energía eléctrica, el gas, el agua y el alcantarillado.
Y por supuesto, el petróleo mexicano".
Garza Galindo consideró que al privatizar este
tipo de bienes y servicios, incluyendo el transporte público, tienden
a romperse las estructuras orgánicas de las empresas, se trastoca
la eficiencia, la productividad y, de nuevo, se incrementan los precios.
Insistió en que el BM no pretende estimular estatizaciones;
maniobra más bien para seguir privilegiando a aquellos gobiernos
que, no obstante tropiezos, continúan siendo amigables y permiten
que se depreden las riquezas nacionales que sólo pertenecen a los
pueblos. "No debe haber gobiernos tan obedientes o amigables que dejen
de servir a su patria", advirtió.
|