Integradas a labores productivas, la mitad de las connacionales residentes en ese país

Mexicanas, las peor pagadas entre migrantes latinos en EU: experta

La mayoría realiza labores domésticas y cuida niños, asegura Elaine Levine Leiter, de la UNAM

Al menos 45 por ciento de los mexicanos que radican en Estados Unidos son mujeres. Muchas no están casadas o son madres solteras que cruzan la frontera impulsadas por la mayor oferta de empleos, de ahí que superen a la población económicamente activa (PEA) femenil en México: a escala nacional sólo 36 por ciento tiene una actividad remunerada, mientras que en territorio estadunidense trabaja más de la mitad de las mexicanas que ahí residen, aseguró Elaine Levine Leiter, especialista del Centro de Investigaciones sobre América del Norte de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).

La participación de la PEA de mexicanas en Estados Unidos "sólo es un poco más baja que la de las nativas, lo que significa que las connacionales que laboran más allá de nuestra frontera norte tienen un nivel de participación mayor al que se genera en México", dijo.

A pesar de ello, reconoció la especialista, las mujeres mexicanas también son "las que ganan menos". Ello, indicó, se debe a que suelen ser las que tienen la más baja escolaridad de entre los migrantes latinos, "pues muchas veces, dependiendo del lugar de procedencia, otras migrantes tienen mayor escolaridad y recursos, mientras que aquí es relativamente fácil cruzar la frontera, lo que genera que un grupo mayor lo intente", puntualizó.

Investigadora e integrante de un equipo multidisciplinario de estudio de las comunidades latinas en Estados Unidos, Levine Leiter indicó que las migrantes han encontrado nuevos campos laborales donde insertarse. En el caso del servicio doméstico, sea de planta o por jornada laboral, sigue funcionando de manera bastante informal en aquel país, lo que ha permitido que sea una puerta de entrada al mercado laboral para muchas mexicanas, dijo.

El pago en estos empleos "puede ser muy bajo, además de que son explotadas, porque en el caso de las que trabajan de planta en una casa, deben estar disponibles 24 horas al día para la patrona".

Sin embargo, afirmó la investigadora, este es uno de los empleos donde pueden insertarse con mayor facilidad. En muchos casos la mujer es la primera que llega, y desde esta posición de trabajo doméstico puede mandar traer al esposo, si tiene buena relación con el patrón, e inclusive, en algunas ocasiones, los mismo empleadores ofrecen ayuda para colocar al esposo en otro empleo".

Entre los costos que implica el trabajo doméstico "está la soledad de la que se quejan muchas mujeres, pero también deben enfrentar decisiones muy difíciles cuando tienen que dejar a sus hijos con algún vecino durante la semana e ir a cuidar a los hijos de los ricos".

Destacó que además del servicio doméstico, la mayor parte de las mujeres se ubican en labores especializadas, como la limpieza de mariscos, que año con año se realiza en la costa este de Estados Unidos. "Hay mujeres que vienen desde Tampico y algunas localidades de Sinaloa a trabajar por determinado número de meses al año, y al terminar la temporada ya no regresan a México y buscan colocarse en otros oficios el resto del año". Muchas otras, agregó, se dedican a labores agrícolas, sobre todo en lo que es la selección y empaque de verduras y frutas, donde se emplea gran parte de la mano de obra femenina.

Huérfanos y desventajas sociales: las consecuencias

La especialista en comunidades latinas en Estados Unidos señaló que entre las principales consecuencias del aumento de mujeres mexicanas migrantes está el aumento de niños que han quedado huérfanos a partir de que ambos padres cruzaron la frontera norte, lo que genera que muchos sean abandonados por sus parientes, que no siempre cumplen con la responsabilidad de cuidarlos. En algunas localidades del país se habla de pueblos de niños huérfanos, aseguró.

En cuanto a los hijos de migrantes mexicanos nacidos en dicho país, indicó que se presenta un alto grado de abandono escolar, pues "nacen en medio de una sociedad opulenta, donde ellos son los que enfrentan una situación de enorme desventaja frente al medio que los rodea, que es la sociedad estadunidense, generando un desajuste muy grave para los niños".