Nosotros iremos a Pachuca, pero no queremos retenes, responden normalistas

Rechazan visita a El Mexe del titular de Educación

CARLOS CAMACHO CORRESPONSAL

Francisco I. Madero, Hgo., 3 de septiembre. "No somos golpeadores ni vándalos", dijeron integrantes del comité estudiantil de la Normal Rural Luis Villarreal, de El Mexe, quienes la semana pasada "desconocieron" al director de la escuela León Mejía Ortiz y al subdirector académico, Irán Ortega Verde, y ayer intentaron llegar la capital del estado para reunirse con autoridades del sector educativo, pero fueron "regresados" por granaderos que establecieron un retén en el municipio de San Agustín Tlaxiaca.

En tanto, en Pachuca, el secretario del Sistema de Educación Pública de Hidalgo (SEPH), Raúl González Apaolaza, advirtió que el conflicto que vive la normal de El Mexe, donde no se han iniciado clases desde el 18 de agosto, fecha en que comenzó el calendario oficial de clases, no será motivo para cerrar el plantel.

El funcionario ofreció acudir a la escuela para "dialogar con los jóvenes" y buscar un acuerdo que destrabe el problema para que empiece el curso escolar; sin embargo, la oferta fue rechazada por Amado Bautista Hernández y Servando Hernández Sánchez, integrantes del comité estudiantil, quienes respondieron que "nosotros iremos a Pachuca, pero no queremos retenes policiacos ni que nos traten como si fuéramos delincuentes. No somos vándalos ni golpeadores".

Esta mañana en la comunidad de El Jiadhi, municipio de Actopan, unos 150 granaderos estaban listos para actuar si los estudiantes cometían desmanes en el municipio, al que acudieron para difundir a través de la radio local las acusaciones contra el gobierno "represor" y las acciones que dicen haber sufrido ayer, cuando pretendían llegar a Pachuca y fueron regresados por la fuerza pública.

Los integrantes del comité estudiantil demandaron el inicio de clases y el regreso de maestros y personal de apoyo, y negaron que ellos sean la causa de la suspensión de labores, aunque la escuela es controlada desde su entrada por los alumnos que impiden el paso a toda persona ajena al plantel, y a los reporteros sólo los dejan entrar si traen identificación, y no pasa cualquiera, porque afirman que "la prensa no dice la verdad, sino lo que les ordena el gobierno".

No hay clases ni negociaciones, y en el plantel hay una docena de camiones secuestrados, aunque los estudiantes afirman que son prestados por las líneas de autotransportes e impiden que se les fotografíe. Los profesores insisten en no entrar a la escuela hasta que haya garantías, mientras las autoridades educativas advierten que la remoción o nombramiento de maestros y directivos es facultad de la autoridad educativa, no de los estudiantes.

Según los alumnos, desde el 18 de agosto no tienen clases debido a que la llegada del director de la escuela, León Mejía Ortiz, provocó "desestabilización" en el comité estudiantil, lo que orilló a los alumnos a desconocerlo.

Señalaron que el director corrió a algunos maestros y a otros los obligó a reprobar a ocho alumnos de séptimo semestre, lo que pone en riesgo su carrera, además de que los destituyeron de la escuela, cuando lo que procedería es una suspensión temporal y el siguiente semestre regresarían a clases.

Luego de la "destitución" del director y del subdirector de la escuela por parte de los alumnos, todo el personal docente y administrativo publicó una carta abierta en la que acusan a los estudiantes de agresiones e intentos de secuestro para obligarlos a poner calificaciones aprobatorias a los que reprobaron.