Desde mayo pasado la Sección Instructora halló al senador responsable de delitos

El día 17 serán presentadas las pruebas inculpatorias contra Ricardo Aldana

ROBERTO GARDUÑO

El dictamen con proyecto de decreto que presentará el presidente de la Cámara de Diputados, Juan de Dios Castro, el 17 de septiembre en sesión secreta ante el jurado de procedencia en San Lázaro, contiene suficientes elementos de prueba contra el senador priísta Ricardo Aldana Prieto por los delitos de peculado, peculado electoral y ejercicio indebido.

El contenido del documento elaborado por la Sección Instructora de la recién terminada 58 Legislatura, que fue integrada por un presidente, el perredista Ricardo Moreno, el priísta Eduardo Andrade -quien actuó en contra por orden de su partido- y los panistas Francisco Blake y Cuauhtémoc Cardona, sólo es conocido por el encargado de la mesa directiva anterior, Armando Salinas Torre, quien lo entregó en propia mano al actual presidente de la Cámara de Diputados, el panista Juan de Dios Castro.

Pese al sigilo con que se manejó la resolución de la Sección Instructora, la mayoría de sus integrantes, el perredista y los panistas, informaron desde mayo pasado que Aldana y Carlos Romero Deschamps fueron encontrados responsables de los delitos que les imputaban la Fiscalía Especializada para la Atención de Delitos Electorales y la extinta Unidad Especializada en Delincuencia Organizada -hoy Subprocuraduría de Investigación Especializada en Delincuencia Organizada-, por peculado electoral, peculado y ejercicio indebido, respectivamente.

Por ello, a Ricardo Aldana le sería retirada la protección constitucional. Romero Deschamps la perdió el 1Ɔ de septiembre, y ahora la PGR consignó el expediente a un juez para que sea liberada la orden de aprehensión, hecho lo cual deberá procederse a la captura del dirigente del Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana.

El análisis de más de 70 mil fojas del expediente produjo que Ricardo Moreno, Francisco Blake y Cuauhtémoc Cardona demandaran al presidente en turno de la Cámara, en el tercer año de la 58 Legislatura, que convocara al pleno camaral a constituirse en jurado de procedencia mediante el llamado a un periodo extraordinario de sesiones.

Los argumentos para desaforar a Aldana, a decir de los entonces tres diputados de PRD y PAN, eran suficientes, y sólo restaba que Armando Salinas hiciera el llamado al pleno camaral. No obstante, éste respondía una y otra vez que no era posible emitir la convocatoria, pues la Ley General del Congreso se lo impedía, ya que este proceso sólo sería permisible en un periodo ordinario.

Esos argumentos llegaron a dividir a los panistas Blake, Cardona y Salinas Torre. Los primeros, en distintas oportunidades, acusaron al entonces encargado de la mesa directiva de evadir su responsabilidad. Al reclamo se sumó cotidianamente el perredista Moreno Bastida.

No obstante, en corto, Armando Salinas Torre primero justificaba que la legislación vigente no le daba atribuciones para convocar a jurado de procedencia teniendo de por medio un receso legislativo en San Lázaro. Y a la par aceptaba que a él le interesaba iniciar el procedimiento: "por mí, mañana lo haría", repetía siempre que los reporteros le cuestionaban su aparente omisión.

Así transcurrieron los meses hasta el cambio de presidente en la mesa directiva. Salinas Torre entregó en propia mano a Juan de Dios Castro el expediente y el dictamen con proyecto de decreto, para que éste resolviera sobre el asunto.

El caso del desafuero de Ricardo Aldana habría permanecido en el semiolvido legislativo, de no ser por la cercanía de Ricardo Moreno y Pablo Gómez. El presidente de la Sección Instructora en la pasada legislatura recordó al coordinador perredista que, iniciados los trabajos del primer periodo ordinario de la 59 Legislatura, el titular de la mesa directiva estaría en condiciones de convocar al pleno como jurado de procedencia porque los artículos 23, 26 y 29 de la Ley Federal de Responsabilidades de los Servidores Públicos así lo establecen.

Gómez aprovechó la coyuntura y solicitó a Juan de Dios Castro que cumpliera con su obligación. El panista reconoció que efectivamente estaba autorizado a cumplir con el requisito, y sin necesidad de informar a los líderes de las bancadas, el jueves pasado emitió la histórica convocatoria.