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México D.F. Viernes 12 de septiembre de 2003
ASTILLERO
Julio Hernández López
Derecho a hablar (con verdad, de ser posible)
Miradores estudiantiles: Castañeda y EU, López Obrador y Chile
JORGE CASTAÑEDA GUTMAN tiene pleno derecho a expresar sus ideas, y nadie que aspire al desarrollo democrático del país debe albergar alegría por las penurias que el ex canciller ha pasado en el Instituto Politécnico Nacional frente a jóvenes que le impidieron continuar con una conferencia de las que en serie está ofreciendo en distintos foros para promover su candidatura a la Presidencia de la República. Festejar hoy el que se haya limitado u obstruido la comparecencia de alguien ante un auditorio abierto y plural, y se le haya negado la posibilidad del debate libre de ideas, sería actuar con miopía histórica y abonar el camino para otro tipo de intolerancias y exclusiones. Para bien y para mal, Castañeda Gutman ha escogido el camino de las presentaciones públicas para difundir su plataforma política, y en esa exposición abierta está sujeto a la revisión plena, incluso apasionada, de su polémica biografía, pero no al amago de agresiones físicas o de silenciamientos forzosos.
DEBE, SIN EMBARGO, el propio Castañeda, responder con honestidad y sin trampas a las circunstancias derivadas del posicionamiento político que ha escogido y no ensayar salidas marrulleras al entrampamiento en que se ha colocado. Exhumar expedientes de presunta discriminación racial ("judío" resulta ser, según la versión castañedista, la principal acusación que le habrían hecho ayer en el IPN) y tratar de que se diluyan u olviden las acusaciones centrales en su contra ("vendepatrias", "títere de Estados Unidos", por ejemplo), lo acerca con visos de caricatura a las alocuciones famosas del entonces presidente Echeverría contra opositores etéreos a los que acusaba de ser emisarios del pasado y ser manipulados por la CIA. Jorge Castañeda Gutman tiene una historia política por la cual responder, y señalamientos específicos en su contra, frente a los cuales no puede ni debe construir coartadas de presunta agresión racista ni cargar la tinta en un grupo siempre oscuro y viscoso como es el del llamado Partido Liberal Mexicano, cuyo dirigente mundial es Lyndon Larouche. Quienes ayer gritaban contra el ex canciller no eran sólo un puñado de larouchistas sino centenares de jóvenes con una lista de reclamos políticos e ideológicos y no sanguíneos.
TAMBIEN HABRA QUE revisar, para darle contexto a los incidentes de ayer, el hecho de que la vanidad del ex funcionario foxista lo ha llevado a creer que puede ser recibido en instituciones públicas de educación superior con la misma tersura y comedimiento que en centros educativos privados (ayer fue el IPN, Ƒcuándo programará una visita a la UNAM?). Esos mismos aires de autosuficiencia le han impedido valorar con veracidad la fuerte irritación que en muchos de quienes han seguido su trayectoria provocan sus zigzagueos ideológicos, la hipocresía de su presunta reconversión electorera a los buenos modales (no más el Castañeda grosero y pedante: ahora cree posible convencer de que ha cambiado lo suficiente como para que voten por él en el 2006), el imposible deslinde del foxismo al que ayudó con la tesis oportunista del voto útil y del que se sirvió políticamente hasta que creyó que le era cercanamente dañino (ahora el tutor de Vicente Fox se ha vuelto crítico de lo que ha hecho el Presidente de la República, como si todo le quedara distante, ajeno), y su evidente papel antiguo y actual de personero de intereses estadunidenses al que el especulador George Soros financia en su carrera política hacia Los Pinos.
CAMPECHANO, MIENTRAS TANTO, Andrés Manuel López Obrador parecía ya en campaña presidencial mientras inauguraba una preparatoria del gobierno capitalino que lleva el nombre de Salvador Allende. El tabasqueño no quiso hablar mucho del ex presidente chileno porque, dijo, le provocaba "sentimientos", aunque recordó la época estudiantil en que se enteró del ataque militar a La Moneda. En una parte de su discurso señaló que Allende había sido un "presidente ejemplar", lo que provocó que de entre los reunidos surgiera un grito: "Como lo serás tú". Tierra mestiza, la pieza musical que interpretaban Los Folkloristas, sonaba como homenaje a las nostalgias con futuro. Antes, en su tradicional conferencia de prensa mañanera, el jefe de Gobierno recurrió a las estadísticas para demostrar que ha atendido mucho a los periodistas y que en un porcentaje mínimo ha eludido contestar lo que los reporteros le plantean. En esos afanes de autojustificación dio nueva muestra de intolerancia, al pretender la descalificación de una pregunta sólo porque quien la hacía era un reportero de Crónica. Enfrentado por reporteros que se negaban a menospreciar las declaraciones del empresario rosarista Carlos Ahumada contra López Obrador, hechas a la revista Poder pero retomadas por La Crónica de Hoy, sólo porque hubiesen sido publicadas en este diario, el tabasqueño trató de eludir las inconformidades, arguyendo que le gustaba saber "de parte de quién" venían las críticas. Al final, acabó señalando que ciertos medios "tienen que ver" con personajes como Ernesto Zedillo y Carlos Salinas. En especial mencionó: "Bueno, pues es evidente la simpatía de La Crónica, sí, del periódico La Crónica con el señor Salinas".
ASTILLAS: EL PROCURADOR FEDERAL de justicia, Rafael Macedo de la Concha, ha mantenido duelo directo con María de la Luz Lima Malvido, a quien desde Los Pinos le habían impuesto como subprocuradora. De hecho, en la PGR hay averiguaciones previas contra la ahora agregada política en Londres, por uso indebido de recursos públicos y por falsedad en declaraciones (respecto a presuntos atentados contra sus hijos). La señora Lima Malvido forma parte del grupo de ultraderecha que jefatura el cardenal Juan Sandoval Iñiguez, y por ello es que a la citada PGR nada mal le cae allegarse datos relacionados con los dineros que el responsable de la arquidiócesis de Guadalajara habría distribuido entre familiares y amigos como, entre éstos, José María Guardia, el concesionario de juegos de azar al que semanas atrás Gobernación canceló maquinitas tragamonedas, luego de que el susodicho Guardia había amenazado con abrir casinos en la frontera norte, con o sin permiso del gobierno mexicano. El lance indagatorio de Macedo de la Concha muestra los "desencuentros" al interior del gabinete foxista, pues mientras el jefe se carga hacia la ultraderecha, con nombramientos recientes dados a militantes de lo que fue el DHIAC, el procurador investiga el delicadísimo expediente del destino real de riquezas cardenalicias ultras... En Monterrey todo está listo para que la Macroplaza lleve el nombre de su creador, Alfonso Martínez Domínguez, a quien una notable parte de sus paisanos reconocen altos merecimientos, a contrapelo de quienes a escala nacional lo recuerdan más por el episodio oscuro de los Halcones... šFeliz fin de semana! Fax: 5605-2099 [email protected]
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