La transmisión televisiva del Cepropie ignoró a Andrés Manuel López Obrador

Austero y breve desfile sin aviones, conscriptos ni voluntarias del SMN

Bastó sólo una hora y 8 minutos para que se cumpliera el ritual de la parada militar

JESUS ARANDA Y ENRIQUE MENDEZ

El desfile militar de ayer se caracterizó por la austeridad en el arsenal de guerra mostrado y por un menor número de efectivos en relación con años anteriores; sin embargo, destacó la presencia de integrantes de las Fuerzas Especiales del Ejército Mexicano, quienes impresionaron no sólo por sus caras pintadas y uniformes camuflados, sino porque la cantidad de elementos superó con creces al resto de los contingentes.

En la transmisión televisiva a nivel nacional nunca apareció el jefe de Gobierno del Distrito Federal, Andrés Manuel López Obrador, pese a que estuvo todo el tiempo en el balcón presidencial. Las cámaras del Centro de Producción de Programas Informativos Especiales de la Presidencia de la República (Cepropie) simplemente lo ignoraron.

En esta ocasión tampoco hubo demostración aérea, la cual sólo se ha repetido en 2001, después del accidente del 15 de septiembre de 1995, cuando cuatro aviones militares chocaron dejando un saldo de seis muertos.

Una hora y ocho minutos bastaron para que poco más de 14 mil integrantes de las fuerzas armadas y de los contingentes ''históricos'' pasaran ante el balcón central de Palacio Nacional, ocupado por el presidente Vicente Fox, su esposa, Marta Sahagún; los titulares de Defensa y de Marina, general Ricardo Vega García y almirante Marco Antonio Peyrot; el presidente de la Suprema Corte, Mariano Azuela; el jefe de Gobierno capitalino, Andrés Manuel López Obrador, y los representantes del Senado y de la Cámara de Diputados, Enrique Jackson y Francisco Arroyo.

Salvo López Obrador, todos los presentes en el balcón presidencial fueron captados por el Cepropie; sobre todo, los televidentes pudieron apreciar cuando Marta Sahagún cargaba al nieto presidencial, así como cuando el mismo mandatario le indicaba al pequeño heredero que volteara hacia la plancha del Zócalo.

Al filo de las 10:55 comenzó el desfile. El contingente del Ejército se redujo de 20 mil efectivos que marcharon el año pasado, a poco más de 14 mil; además, este año no desfilaron ni conscriptos ni voluntarias del Servicio Militar Nacional, aunque sí apareció un ''agrupamiento femenino'' que como tal no existe en el organigrama oficial.

Una escolta con tres fusileros paracadistas abrió la marcha, para luego dar paso a los planteles militares y agrupamientos ''históricos''. Siguió el Cuerpo de Fuerzas Especiales. Uno a uno, nueve batallones de soldados de elite, con uniformes para selva y desierto, dejaron constancia de su capacidad.

El reducido contingente de Marina (mil 574 elementos), casi la mitad que la representación del año anterior, estuvo encabezado por el almirante Casimiro Armando Martínez Pretelín. Aunque eran pocos en número, los integrantes de las fuerzas de reacción anfibia y fuerzas especiales llamaron la atención, así como unos marinos que llevaban uniforme de camuflaje Guille, que es utilizado por los francotiradores.

El general Gastón Menchaca Arias rindió al presidente Fox el parte del desfile: ''¡Sin novedad!'', con lo que concluyeron oficialmente los festejos por el 193 aniversario del inicio de la Independencia.