Peculado contra el DF

Hasta noviembre, veredicto contra Espinosa Villarreal

ALFREDO MENDEZ ORTIZ

El ex regente capitalino Oscar Espinosa Villarreal sabrá hasta noviembre próximo si es declarado culpable o inocente del delito de peculado por 420 millones de pesos en agravio del gobierno capitalino, pero aunque el juez cuarto penal, Enrique Cedillo, determinara que el también ex secretario de Turismo es culpable del acto ilícito que se le imputa, éste no pisará la cárcel debido a la suspensión definitiva que lo protege de cualquier orden de aprehensión en su contra hasta que se resuelva el fondo del amparo 679/2003 que solicitó su defensa en 2001, lo cual podría tardar varias semanas, incluso meses.

Fuentes del Poder Judicial indicaron que aunque actualmente el proceso penal que enfrenta Espinosa Villarreal se encuentra detenido por orden del juez Cedillo, la defensa del ex funcionario presentó en días pasados una copia certificada en la cual le solicitan al juzgador que reinicie el procedimiento legal.

El proceso fue detenido luego de que el juzgador tomó conocimiento de que el ex regente capitalino denunció violaciones a los artículos 14, 16, 20 y 22 de la ley de amparo, y según el artículo 76, fracción 12, del citado ordenamiento, cuando se denuncian violaciones a las garantías individuales, un juez no podrá dictar sentencia en un juicio original, y deberá suspender el mismo.

Sin embargo, en días pasados el abogado Alonso Aguilar notificó al juez Cedillo que se desistió ante la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) respecto al artículo 20 -el cual prohibía legalmente que continuara el procedimiento penal- para que ordenara el reinicio del proceso que enfrenta su cliente. Esta decisión deberá tomarse durante la próxima semana, y si entonces el juez penal determina que debe continuar el proceso, tendrá 30 días hábiles para dictar la sentencia correspondiente.

El litigante promovió en su momento un juicio de amparo contra la orden de aprehensión que enfrenta su cliente y contra el tratado de extradición entre México y Nicaragua, luego de que en 2000 el gobierno del segundo país entregó a las autoridades mexicanas a Espinosa Villarreal, debido a que la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal lo solicitó en extradición para que respondiera por el delito de peculado.