Las autoridades del Primero de Octubre no tomaron medidas al detectarse el brote

El ISSSTE aún no logra aislar bacteria que mató a siete niños en un hospital

Los padres de los menores fallecidos rechazan indemnizaciones; dos bebés más están graves

JOSE GALAN

Mientras que el ISSSTE no logra aislar la bacteria que provocó la muerte de siete recién nacidos en el hospital Primero de Octubre, otros dos se encuentran muy graves y aislados. La institución rechazó la posibilidad de cerrar el hospital, y reconoció que las demandas de los padres de familia están en manos de la Procuraduría General de la República (PGR) y de la Comisión Nacional de Arbitraje Médico (Conamed) por negligencia profesional y homicidio.

Además, informó que otros tres niños fallecieron en la misma sala neonatal, aunque subrayó que su deceso obedeció a "otro tipo de causas", lo que provocó malestar entre los padres de familia, que achacaron el fallecimiento de los bebés al contagio. Cabe destacar que desde el principio, a pesar de que se descubrió la bacteria en dos niños que aún estaban vivos, los jefes del hospital no tomaron ninguna medida preventiva como aislarlos o ponerlos en cuarentena, y ni siquiera informaron a las autoridades centrales del ISSSTE sobre el desarrollo de una epidemia, lo que sí han hecho con los dos infantes vivos y cuyo pronóstico es grave y reservado. No reaccionan a los antibióticos ni al tratamiento.

Por otra parte, los padres de familia rechazaron recibir cualquier indemnización y decidieron mantener vigentes las denuncias ante las autoridades judiciales federales y la Conamed, a pesar de los esfuerzos de representantes del ISSSTE por llegar a un acuerdo. En conferencia de prensa, la subdirectora general médica del ISSSTE, Elsa Carolina Rojas, informó que se han emprendido "medidas correctivas" en todo el hospital, en donde sólo permanecen "dos casos aislados", pero mientras no se logre controlar el brote de la bacteria, el hospital no brindará servicio de maternidad y parto que efectúan, "hasta que sea necesario" los nosocomios Zaragoza y Adolfo López Mateos.

"Es claro que se trata de una bacteria oportunista que ataca sobre todo a los desnutridos, a los bebés prematuros y a pacientes con infecciones severas", agregó la funcionaria, que no pudo explicar por qué los dos primeros casos en los que se descubrió la bacteria -luego de un análisis que tardó cinco días en arrojar resultados- no fueron aislados en su momento. Pero argumentó que es un hospital con 29 años de labor y gran carga de trabajo: "atiende diariamente mil consultas, practica 252 cirugías y tiene una ocupación de 86 por ciento".

Por otra parte, trascendió que dos personas de la tercera edad, cuyos nombres no fueron proporcionados, también se contagiaron de la bacteria. Uno está aislado y el otro recibe ya tratamiento en otro hospital. "No hemos encontrado el origen, e incluso investigadores de la UNAM participan ya en los análisis de microbiología celular para determinar las causas", informó. Pero fuentes de la institución revelaron que cuando se dio el brote del contagio, los médicos y directivos del hospital mantenían "pésimas relaciones", y que, "en un claro caso de negligencia", los responsables del nosocomio nunca informaron a las autoridades centrales de la emergencia, lo que impidió adoptar medidas extremas.

Son siete los recién nacidos que fallecieron por la infección, pero los otros tres murieron por otras causas como "malformaciones múltiples", lo que no creen los padres de familia, que se han sumado a las demandas por negligencia médica. "El ISSSTE ha querido solidarizarse con los padres de familia, de acuerdo con el Código Penal", aceptó, pero estos, que buscan establecer una estrategia conjunta, han decidido no aceptar ningún tipo de indemnización.

González Roaro solicita informes

Por otra parte, en un oficio fechado ayer, el director general del ISSSTE, Benjamín González Roaro, solicitó formalmente al director del Hospital Regional Primero de Octubre, Carlos Soberanes Fernández, toda la información detallada sobre el fallecimiento de los recién nacidos, "con objeto de que la Conamed intervenga en la investigación y esté en posibilidades de emitir una opinión técnica", luego de que la propia Conamed, mediante el oficio CNAM/330/ 4173/03 con fecha también de ayer, le solicitara esa misma información, que incluye el reporte cronológico detallado y completo de los hechos con relación a la atención médica brindada a los menores fallecidos; copia simple y legible de los expedientes clínicos completos de cada uno de los pacientes fallecidos y/o afectados, incluyendo las notas de enfermería e indicaciones, así como los resultados de laboratorio y gabinete.

Además, copia simple y legible de los expedientes clínicos completos de las madres con base en la atención ginecobstétrica brindada, resultado de los estudios bacteriológicos más recientes de las áreas donde ocurrieron los hechos; los reportes del Comité de Infecciones Nosocomiales, así como el punto de vista institucional, sobre los hallazgos y medidas adoptadas al respecto, y los reportes de los controles inherentes a las medidas obligatorias, tanto preventivas como correctivas. Además, copia del reglamento que en su caso oriente la operación de dicho comité; estadísticas del número de pacientes atendidos en la Unidad de Cuidados Intensivos, morbilidad, promedio de atención hospitalaria y morbimortalidad de los años 2001, 2002 y 2003.