Iridia Salazar, feliz por haber conseguido la presea de plata

Una sola medalla trajeron los taekwondoístas de Alemania

No estoy acabado por el nocaut del iraní, aseguró Víctor Estrada

ROSALIA A. VILLANUEVA

Con la única presea de plata que México ganó para México en el Campeonato Mundial de taekwondo, en Garmmish Partenkirchen, Alemania, regresó ayer Iridia Salazar, quien al lado de Víctor Estrada y dos atletas más representarán al país en el Preolímpico de Francia, en diciembre próximo.

"Esta medalla me costó mucho por la presión que había de que no se ganaba nada y en el último día cayó", dijo la capitalina, quien traía un parche en el mentón por la patada que dio el punto a la griega Areti Athanaspoulou para que se coronara en la categoría de 59 kilos o peso pluma.

Tras recibir el abrazo de su madre, que le entregó un ramo de flores y con cuidado le tocaba la cara, Iridia mostró su presea, la levantó y la besó.

"Es la tercera que ganó en mundiales, pero ahora me llevé un golpe de la griega que me cortó; no sabemos si con la uña (del pie). Me sacó de concentración, no me paraba la sangre y se me fue el oro".

La taekwondoísta de 22 años dijo que el siguiente paso será el Preolímpico de París para buscar su pase a Atenas 2004, por lo que a partir de este lunes comenzará a entrenar en el CDOM.

Mencionó que además de la presión que cargaba llegó al Mundial con rendimiento de 80 por ciento, debido a que dos semanas antes estuvo agripada.

Por otro lado, Víctor Estrada dijo que no está acabado, ni que su resultado haya sido un fracaso tras ser noqueado en cuartos de final por un iraní en la división de menos de 80 kilos.

Explicó que se sentía satisfecho por lo que había hecho y expuso que en ese combate "gracias a Dios no perdí el conocimiento, sólo el equilibrio. Recibí la patada en el oído; es un sonido tan fuerte que te aturde completamente.

"Vi cuando el juez me contó, cuando llegó el doctor para preguntarme si me acordaba quién era; yo le dije que sí, pero me llevó la fregada porque este maldito me pegó en la cara y fue un suertudo".

El medallista olímpico comentó que cuando se levantó mucha gente le aplaudió en reconocimiento a su actuación en el combate, pues hasta el momento del desenlace dominaba.

"A pesar de ello", vengo motivado, agregó Estrada, quien señaló que dentro de 15 días se irá con el equipo mexicano a realizar un campamento en Corea, como preparación de cara al Preolímpico de París.

Su padre, el doctor Manuel Estrada, calificó de regular la actuación del equipo de taekwondo a excepción de Iridia, su hijo y Verónica Teuret, por lo que informó que la próxima semana se darán a conocer los nombres de dos titulares más y cuatro suplentes que irán a Francia.

En tres vuelos diferentes regresaron de Atenas los clavadistas Rommel Pacheco, Laura Sánchez y Paola Espinosa; la gimnasta Brenda Magaña, el equipo de nado sincronizado y el de las pesistas.