México D.F. Domingo 5 de octubre de 2003
Examinan en San Lázaro la astringencia
financiera
El gobierno, sin margen de acción por las estrechez
del presupuesto en 2004
ROBERTO GARDUÑO
El Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF)
para 2004 estará comprometido hasta en 83 por ciento en el financiamiento
de los intereses de la deuda pública, del Instituto de Protección
al Ahorro Bancario (IPAB), participaciones a los estados, gasto social,
seguridad nacional y empresas paraestatales.
Un análisis del Centro de Estudios de las Finanzas
Públicas de la Cámara de Diputados refiere que el PEF deberá
ser de un 1 billón 572 mil 259 millones de pesos, si el gobierno
de Vicente Fox desea cumplir con el déficit fiscal de 0.5 por ciento
del producto interno bruto (PIB).
Al monto total del PEF, señalan los especialistas
en materia de finanzas públicas, se le deberán descontar
recursos comprometidos (etiquetados), tanto en lo que se conoce como gasto
no programable, en su connotación de intereses de la deuda pública,
participaciones a los estados de la República y el ramo 33.
Sobre
obligaciones gubernamentales, se considera la deuda bancaria mediante el
IPAB, los Proyectos de Impacto Diferido en el Gasto (Pidiregas), los fondos
de pensiones y aquellos destinados a las secretarías de Educación
Pública, Salud, Desarrollo Social, Agricultura, así como
a Petróleos Mexicanos y Comisión Federal de Electricidad.
En ese ámbito, la Cámara de Diputados estima que el gobierno
erogará 666 mil 198 millones de pesos.
Además habrá que sumar las partidas mínimas
necesarias para el Instituto Mexicano del Seguro Social y el Instituto
de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado. En ese
nivel también se incluyen recursos destinados a las secretarías
de Educación y Agricultura, que con otras dependencias requerirán,
en conjunto, aproximadamente 649 mil 285 millones de pesos.
De lo anterior se observa que del gasto máximo
estimado (un billón 572 mil 259 millones), un billón 315
mil 483 millones, equivalente a 83 por ciento, se encuentra comprometido,
por lo que con el restante 17 por ciento se financiará el resto
del gasto gubernamental. Se sugiere que ante tal situación, la discusión
en el Congreso corre el riesgo de centrarse en la evolución de las
variables económicas, en las cuales no hay control, como son precio
del petróleo y déficit.
El contexto económico en el que se presentará
el paquete financiero para 2004 resultará ser uno de las más
complicados de los años recientes, porque el margen de maniobra
de las finanzas públicas, aun cuando se lograran consensuar algunas
modificaciones fiscales, prácticamente será de cero.
Sobre el particular, el asesor económico de la
fracción parlamentaria del PRD, Mario di Costanzo, sostuvo que las
proyecciones económicas para los próximos meses no sugieren
signos de recuperación y el desempleo continuará en aumento.
Inclusive en el contexto internacional se prevén menores flujos
de capital y una baja en el precio del petróleo para el próximo
año, a lo que se suma que las exportaciones mexicanas a Estados
Unidos son desplazadas por las de los países asiáticos, principalmente
China.
"En el caso de México, en el mejor de los escenarios
la economía registrará, en el presente año, un modesto
crecimiento cercano a 1.5 por ciento. Con ello las finanzas públicas
verán estancados sus ingresos, por lo que las autoridades tenderán
a ser sumamente cautelosas en el manejo del gasto, más aún
cuando no se observan señales de que pueda negociarse una reforma
fiscal, menos sobre el IVA".
El PIB estimado para el presente año se ubicaría
en aproximadamente 6 billones 480 mil millones de pesos, resalta el análisis
del centro de estudios. En el 2004, se añade, las autoridades económicas
del país plantearán, en el mejor de los casos, una meta de
déficit fiscal de entre cero y medio punto del PIB.
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