La administración de Sánchez de Lozada amenaza con imponer el estado de sitio

Estalla artefacto en la sede del partido gobernante de Bolivia; hay tres heridos

Organizaciones sociales anuncian que radicalizarán sus movimientos a partir de este lunes

DPA Y AFP

La Paz, 4 de octubre. Al menos tres personas resultaron heridas por la explosión de un artefacto detonado frente a las puertas de la sede del gobernante partido boliviano Movimiento Nacionalista Revolucionario (MNR), en el populoso barrio de San Pedro, lo cual fue calificado por el gobierno como "un acto criminal y cobarde".

La detonación causó heridas de diversa consideración a tres transeúntes. El atentado ocurrió a la medianoche del viernes al sábado, en momentos que el gobierno de Gonzalo Sánchez de Lozada enfrenta una huelga general y bloqueos campesinos en reclamo de su renuncia y en rechazo a la exportación de gas sin una consulta previa.

Los líderes de la protesta se deslindaron de ese incidente, frente a la acusación del gobierno de que ellos estaban detrás de lo ocurrido, según declaraciones del viceministro del Interior, José Luis Harb. El funcionario no dio nombres de los culpables, pero dijo que era un atentado "contra la democracia".

Sectores sociales acordaron radicalizar las protestas a partir del lunes, ante lo que el gobierno dijo que un "ataque político" opositor de esa naturaleza merece también una respuesta política como podría ser el estado de sitio.

La Central Obrera Boliviana (COB) y los sindicatos de campesinos y cocaleros, que encabezan las protestas, advirtieron que las marchas callejeras y la huelga general por tiempo indefinido se intensificarán, así como los bloqueos de carreteras en todo el país.

El ministro de Gobierno, Yerko Kukok, respondió que el Ejecutivo hará aquello que la Constitución política del Estado le permite hacer. "Evaluamos dar una respuesta que esté dentro del marco estricto de la ley", indicó en alusión al estado de sitio.

En este contexto, el ministro de Educación, Hugo Carvajal, dimitió este jueves a pedido del presidente Sánchez de Lozada, quien lo instruyó para que organice trabajos pendientes en el Parlamento y luego retorne al gabinete.

El mandatario está preocupado por lo que ocurre en el altiplano andino a cinco días de una huelga en La Paz y otras regiones del país, y luego de 20 días de crecientes movilizaciones campesinas, a raíz de su proyecto de exportación de gas natural, según se dijo.

En Santiago, el diario El Mercurio reportó que el diputado boliviano y líder del Movimiento Al Socialismo (MAS), Evo Morales, planteó su interés de sentar las bases para que su país y Chile retomen las relaciones diplomáticas, rotas por La Paz en 1978, tras fracasar las pláticas para una salida al mar de los bolivianos.