Elogian su infatigable quehacer para preservar ese patrimonio cultural

Ponen el nombre de Cristina Payán a una sala del centro Culhuacán

''Ella creía en la vida y en el respeto a los otros'', expresó Carlos Payán

La promotora dirigió ese recinto desde su apertura en 1983 hasta 1992

CARLOS PAUL

Como una manera de reconocer la versatilidad, la inteligencia y la sensibilidad social, pero sobre todo su labor de promotora cultural comprometida con la difusión y el apoyo a las múltiples expresiones culturales de México, desde este miércoles la sala De Profundis, del Centro Comunitario Culhuacán, lleva el nombre de Cristina Payán, quien dirigió este recinto desde su apertura en 1983 hasta agosto de 1992.

Cristina Payán solía decir que la verdadera marginación era la ignorancia. Para ella, la educación no se reducía al ejercicio de una profesión. Por eso uno de sus proyectos más relevantes fue convertir el ex convento agustino de Culhuacán, que data de 1553, en un espacio privilegiado con carácter comunitario, por medio de una estrategia poderosa: corresponsabilizar a la comunidad en la conservación de su patrimonio cultural, partiendo de la convicción de que si la población conocía el valor histórico y artístico del convento, y éste presentaba una oferta cultural que respondiera a sus intereses y demandas de conocimiento, las personas participarían en los trabajos de restauración, investigación y difusión.

La también sicóloga y etnóloga ''no se equivocó". A casi 20 años de su apertura, el Centro Comunitario Culhuacán es hoy ''el único sitio histórico que se localiza en Iztapalapa", un recinto cultural que ha logrado mantenerse con la participación activa de la población de esa zona, enlazando la cooperación de instancias oficiales y privadas, comentó la investigadora Diana Bedolla, quien junto con Carlos Payán, Sergio Raúl Arroyo García, director del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), y Thelma Fong Sang, directora del centro, además de familiares y amigos, se dieron cita en el acto.

Defensa de una riqueza comunitaria

Emocionado, Carlos Payán recordó que ''Cristina trabajó durante años en este proyecto con apasionada alegría. Pudo lograr que se restituyeran terrenos que habían sido sustraídos a los espacios conventuales; construir un pequeño lago en recuerdo del embarcadero prehispánico que antes llegaba hasta los límites de esta construcción; ausentar de los muros y murales coloniales la humedad que los perturbaba, reconstruir el molino de papel que probablemente fue el primero que se erigió en América; integrar una biblioteca pública; crear una escuela de educación abierta, becar a estudiantes que salían de esa escuela para que pudieran continuar sus estudios; crear lugares de esparcimiento para personas de la tercera edad. Practicar con ellos una especie de tequio, donde los vecinos venían a ayudar en las tareas de limpieza y conservación de los jardines, trabajos en los que la señora Ambriz cumplió un papel invaluable; además publicó una investigación sobre la comida lacustre del entorno con las recetas que proporcionaron las vecinas y cuya presentación ha sido una de las más deliciosas a las que he asistido en mi vida", volumen que se titula La comida en el medio lacustre.

Impulsó también diversas exposiciones con donaciones, préstamos de piezas y testimonios de los ocho barrios de Culhuacán, así como conferencias sobre sus tradiciones y un cineclub.

Respeto por los indígenas

El hecho de que la sala De profundis -en su momento recinto para la penitencia y oración- lleve el nombre de Cristina, conlleva una paradoja, concluyó Carlos Payán, ''pues ella fue comunista en su formación política y no era creyente, pero creía en la vida, en el amor, en el respeto a los otros, los que si creen, los que piensan diferente. Creía en el trabajo, creía y respetaba a los indígenas y cuidada el patrimonio cultural de su nación como propio".

El director del INAH destacó la labor de Cristina Payán dentro del instituto, como fundadora del Centro Comunitario Culhuacán, directora de Servicios Educativos del Museo Nacional de Arte, titular de la Coordinación Nacional de Museos y Exposiciones del INAH y directora del Museo de Culturas Populares.