No regresaría al boxeo para arriesgar mi integridad física, comentó

Ingresé al Salón de la Fama y ahora me codeo con los grandes: Chiquita González

Los actuales campeones no tienen carisma, nadie los sigue, afirmó el ex monarca minimosca

ANA MONICA RODRIGUEZ

Tras siete años de retiro y con su reciente integración al Salón de la Fama del boxeo en Los Angeles, California, Humberto La Chiquita González asegura que no regresaría al deporte de los puños para arriesgar su integridad física, y sólo deja en remembranzas sus glorias en el cuadrilátero.

El ex campeón minimosca del Consejo Mundial de Boxeo (CMB), quien también ostentó el fajín de la Federación Internacional (FIB), realizó 18 combates de título mundial y se retiró en 1995, luego de sucumbir ante el tailandés Saman Sorjaturong.

Al referirse a su reciente ingreso al Salón de la Fama junto con Rodolfo El Gato González, el ex monarca aseguró que "me sentí muy contento por mí y por mi familia al convertirme en un inmortal del boxeo. Ahora disfruto y me codeo con los grandes".

Ambos púgiles fueron colocados junto a los máximos exponentes del boxeo, como Muhammad Alí, Rocky Marciano, Raúl Ratón Macías, Rubén Púas Olivares y José Angel MantequillaNápoles, entre otros.

"Fue muy bonito ver que se vendían mis fotos y los videos de mis peleas que inclusive yo mismo no tenía", señaló la Chiquita, considerado el mejor peleador de las llamadas divisiones pequeñas, quien llegó a cobrar hasta un millón de dólares en sus contiendas frente al estadunidense Michael Carbajal.

Ahora reconoce con mesura que "en mis tiempos me tocaron buenas bolsas".

-¿Recuerdas tu última pelea?

-Me acuerdo de las que gané, pero no de las que perdí. De hecho, en el último combate por el título aseguré que saliera victorioso o no, de todos modos me retiraba. Del rival ya ni me acuerdo.

-En la actualidad ya no hay más ídolos...

-Ahora hay campeones que no tienen carisma y la gente no los sigue. Además les hace falta promoción y darlos a conocer hablando de ellos. Pero el boxeador ya nace con el carisma.

Concentrado al hablar y con la vista fija en una taza de café como para no perder el hilo de la conversación, a la Chiquita le complace que sus hijos también hayan heredado el gusto por el deporte. "Somos americanistas de hueso colorado, mis hijos juegan para las fuerzas básicas" del plantel de Coapa.

-¿También aceptarías que tus hijos subieran a un ring?

-Si ellos quieren sí, pero es una decisión muy difícil de aceptar. Por el momento les gusta mucho el futbol.

Ante el regreso de Julio César Chávez para sus peleas de despedida, la Chiquita sólo atina a decir que lo que vivió particularmente sobre el cuadrilátero es historia "y a mis 37 años no tendría caso regresar".